La colaboración del Centro Simon Wiesenthal, especializado en la investigación de actividades nazi, fue solicitada formalmente con la finalidad de esclarecer el caso del submarino, presuntamente alemán de la Segunda Guerra Mundial, encontrado en cercanías del puerto bonaerense de Necochea, indicaron desde el grupo Eslabón Perdido.
En tal sentido, el grupo Eslabón Perdido, descubridor del naufragio, realizó una presentación dirigida al doctor Ariel Gelblung, Director de Centro Simon Wiesenthal Latinoamérica, para que dicha entidad colabore en la investigación respectiva y además pida al gobierno argentino que oficialmente identifique la unidad naval que fue encontrada a 28 metros de profundidad frente a las playas bonaerenses de Costa Bonita y Arenas Verdes.
Si bien la Prefectura Naval Argentina inspeccionó el casco y realizó un registro de 8 horas de filmación, el ministerio de Seguridad, del que depende dicha fuerza, aseguró que no se pudo saber a qué tipo de embarcación pertenece.
Sin embargo, Eslabón Perdido obtuvo dos pericias, una nacional -a cargo del ingeniero y perito Martín Canevaro, presidente del Consejo Profesional de Ingeniería Naval- y otra internacional -realizada por el experto de la Liga Naval Italiana Fabio Bisciotti- quienes dictaminaron que el naufragio se corresponde con el casco de un submarino. “Como Usted comprenderá este sensacional descubrimiento cambia la historia hasta ahora conocida ya que, de acuerdo a los documentos oficiales, ningún submarino del Tercer Reich llegó en forma furtiva al país pues solamente se reconoce el arribo de los submarinos U-530 y U-977 para rendirse oficialmente en el puerto de Mar del Plata. La llegada de por lo menos otro U Boot, además de los citados, en forma subrepticia supone el ingreso clandestino de cargas y nazis fugitivos que, por razones obvias que hacen al esclarecimiento de la verdad, merece ser investigado”, señala la misiva enviada al doctor Gelblung.
En la presentación efectuada al Centro Wiesenthal se informó que se gastaron más de 60 millones de pesos el año pasado para la verificación oficial de dichos restos náufragos, sin resultado alguno, y que el ministerio del Seguridad comunicó que no están previstas nuevas tareas de identificación de dicha unidad naval.
Se ha recurrido al Centro Wiesenthal había cuenta que una de sus áreas principales de trabajo es la investigación histórica de las actividades nazis, contando con importantes archivos y documentación sobre el tema que, sumados al hallazgo del submarino, permitirían dilucidar parte del pasado que hasta hoy permanece oculto, indicaron a través de un comunicado desde Eslabón Perdido.