Por iniciativa de la Agrupación Marítima del Sudeste, sus integrantes decidieron limpiar y revalorizar los monumentos de avenida 59 y 10 y y 59 y 14.
Allí se encuentran el monumento al pescador y a la familia del pescador que fueron hidrolavados, emprolijados y pintados.
Alejandro Jacín, integrante de la agrupación, le contó a TsnNecochea que para concretar estos trabajos contaron en el apoyo del municipio, por parte del parea de Obras Públicas que colaboraron con la reconstrucción de una de las veredas.
Además, se proyecta colocar un ancla en ambos monumentos y nuevas luminarias.
En ese mismo marco, Jacín informó que el próximo lunes 24 decidimos se estará proyectando nuevamente la película “Barcos de papel”, con la presencia del director del filme y de familiares de los tripulantes de “El Repunte”.
Este documental, que se proyectará en el Concejo Deliberante, relata la tragedia del 17 de junio de 2017 cuando el hundimiento del Repunte, barco pesquero de la flota marplatense, dejó dos sobrevivientes, tres muertos y siete desaparecidos en el mar.
El Repunte llegó al país, ya usado, en 1968. Era un barco pesquero de 32,6 metros de eslora perteneciente a la firma Ostramar S.A., y tenía asiento en Mar del Plata, donde estuvo inactivo tres años. Fue la llamada “fiebre del oro rojo”, el furor por los langostinos, y el afán de lucro de los empresarios pesqueros por aprovechar esa demanda lo que puso a la embarcación otra vez en actividad. Era un barco “merlucero” pero se le agregaron dos tangones –brazos laterales sacados de otro buque, el Don Luciano- para poder incursionar en la pesca del langostino. La Prefectura no pudo explicar por qué no se lo había inspeccionado, ya que con esos cambios se modificaba su centro de gravedad.
El film recorre la enorme lucha de los familiares del Repunte que se han organizado en Ningún Hundimiento Más, acompañados por los del Rigel, hundido en 2018, el San Antonino en 2016 y también los del ARA San Juan.
La tenacidad de los familiares ha tenido varios logros como la constitución en 2020 de un organismo técnico descentralizado, la Junta de Seguridad en el Transporte, que integrado por ingenieros navales, marinos experimentados y peritos, viene sacando a la luz la gravedad del estado de la flota pesquera y ha tomado resoluciones de alcance internacional sobre los botes salvavidas que fallaron a la hora de ser necesarios y reglamentado la obligación a las embarcaciones de proporcionar “trajes de abandono” (de supervivencia e inmersión) para toda la tripulación.