El Día del Niño en la Argentina se celebra todos los años el tercer domingo de agosto. El objetivo de esta efeméride es resaltar la importancia de los más pequeños en la sociedad y promover su bienestar, su educación y su desarrollo integral.
Día del Niño: el origen de la fecha
La celebración del Día del Niño no tiene un origen concreto y específico debido a que fueron varias organizaciones las que la impulsaron. Ya en 1952, por ejemplo, Unicef y la Organización de Estados Americanos (OEA) acordaron que cada país del mundo debería establecer una fecha para la jornada.
Dos años más tarde, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) también recomendó que se festeje el Día Universal del Niño, aunque —tal como estaba establecido— la fecha quedaría a elección de cada país.
Actualmente, la ONU celebra el Día Universal del Niño el 20 de noviembre de cada año, debido a que en esta fecha tuvieron lugar dos acontecimientos importantes: la Declaración de los Derechos del Niño en 1959 y la Convención sobre los Derechos del Niño en 1989.
En la Argentina, sin embargo, la fecha pasó a ser todo un símbolo del mes de agosto. Durante muchos años se festejó el segundo domingo del mes, pero en la actualidad se celebra el tercer día domingo del mes.
¿Por qué el Día del Niño se llama ahora Día de las Infancias?
En 2020, la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia (SENAF), que depende del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, propuso que el Día del Niño pasara a llamarse oficialmente Día de las Infancias con el objetivo de resaltar la diversidad de los más pequeños.
Es también una manera de celebrar la infancia en todas sus formas, teniendo en cuenta las realidades y necesidades de cada niño, sea cual fuese su origen, género, orientación y capacidades
En definitiva, esta fecha se presenta como la oportunidad ideal para recordar que todos los niños merecen amor, respeto y oportunidades para crecer y prosperar, por lo que la inclusión y la equidad se han convertido en valores fundamentales para esta celebración.