La iniciativa de la senadora kirchnerista Norma Durango sugiere que la mitad de los billetes de mil pesos o superior denominación lleven el rostro del excapitán y entrenador de la Selección Argentina.
Un proyecto de ley presentado en el Senado propone la impresión de billetes y sellos postales con la imagen del Diego Armando Maradona para homenajear al astro fallecido el 25 de noviembre.
La iniciativa fue presentada por la senadora del Frente de Todos Norma Durango.
El proyecto sugiere “al Banco Central de la República Argentina que la impresión del 50%, como mínimo, del total previsto de los billetes de curso legal de un mil (1000) pesos o superior denominación a ser impresos durante el año 2021, comporten la efigie de Diego Armando Maradona de un lado y el instante del segundo gol a Inglaterra, realizado en México, el 22 de junio de 1986, del otro”.
También propone incluir en el “Plan de Emisiones de Sellos Postales del Año 2021 una colección de estampillas conmemorativas de Diego Armando Maradona, que comprendan tanto su carrera deportiva en los clubes donde jugó, como en los diversos mundiales donde participó, tanto como jugador o como director técnico de la selección argentina”.
El proyecto es acompañado por varios senadores y senadoras del PJ, entre ellos Alfredo Luenzo, Eugenia Catalfamo, Beatriz Mirkin, Silvina García Larraburu, Carlos Caserio y Gerardo Montenegro.
En los fundamentos, Durango explicó sobre Maradona que “la excepcionalidad de su vida y de su trayectoria, no exenta de límites y errores, lo enmarca en la tradición griega de los héroes, al menos tal como es percibida por Nietzsche en El nacimiento de la Tragedia”.
“Lo apolíneo y lo dionisíaco están presentes tanto en la cancha como en la calle, en la villa donde vivió como en los palacios que tuvo. Por mérito propio, que no por herencia. No existe, por lo tanto, un Diego Maradona como jugador y otro como persona. Sería elegir la parte que a cada cual más le guste, lo que habla –tal vez- mucho de cada cual, pero poco de Diego. Sería elegir una percepción conformista, que busque quizás lavar los propios pecados”, concluyó la legisladora.