Un joven integrante de la Prefectura Naval Argentina murió esta tarde de un disparo, en medio de un control de rutina sobre la cuarentena en la ciudad de Puerto Deseado y su agresor fue abatido, poco después, durante un enfrentamiento con la Policía de Santa Cruz.
El uniformado fue identificado como el cabo Ricardo Soto, mientras que el civil fallecido era Pedro Espinoza, de 21, según consigna el diario La Opinión Austral.
Soto alcanzó a ser trasladado al Hospital Distrital de Deseado, aunque falleció poco después.
Espinoza, en tanto, murió en medio de la fuga, cuando buscaba refugio en un gimnasio, según trascendió.
El hecho fue tan conmocionante que en el lugar se presentaron no solo autoridades judiciales y de la fuerza, sino también el intendente Gustavo González y el presidente del Concejo Deliberante, Servio Viotti.
Todo se registró en un control vehicular en las calles Belgrano, entre Colón y Moreno, cuando la Prefectura detuvo a un civil para pedirle la documentación pertinente.
En circunstancias poco claras, el joven -algunos lo sindican como hijo de un comisario retirado- sacó un arma y le disparó a Soto, que se encontraba con chaleco antibalas, aunque el proyectil le habría ingresado por un lateral del cuerpo, a la altura del corazón.
El agresor escapó hacia la costanera y, finalmente, fue abatido por la policía provincial, aunque tampoco se conoce por el momento detalles de ese desenlace.