En una semana de gran actividad, el puerto quequénense se consolidó como uno de los principales puntos de salida de productos agrícolas del país. Un total de 59.974 toneladas de mercadería fueron embarcadas en cuatro buques con destino a Brasil, Malasia, Nueva Zelanda y Países Bajos.
Entre los productos exportados se destacaron el maíz, con un volumen de 24.839 toneladas; la cebada, con 10.400 toneladas; y los pellets de girasol, que alcanzaron las 24.735 toneladas. Estos envíos no solo impulsan la economía regional sino que también posicionan a Argentina como un actor clave en el mercado internacional de granos.