La justicia de Garantías avaló el pedido de detención para un policía que está acusado de asaltar a dos familias en el Balneario Arenas Verdes, mientras continúa la investigación en la que existen sospechas de la participación de otros tres efectivos que revisten en la Policía Bonaerense.
TSN Noticias pudo saber que varias de las víctimas reconocieron buena parte de los elementos exhibidos que habían sido secuestrados en un allanamiento, quedando pendiente nuevas diligencias en el mismo sentido.
Como ya se informó, en la noche del último sábado11 de enero una banda de delincuentes armados, con rostros cubiertos y vistiendo uniforme policial asaltaron de manera violenta a los integrantes de dos familias en viviendas de dicho balneario ubicado en el partido de Lobería.
El oficial inspector Martín Ezequiel Lencina decidió romper el silencio cuando estuvo frente a frente con el fiscal Carlos Larrarte. En su declaración negó su responsabilidad en los hechos señalando que en ese momento no se hallaba presente en el lugar y aportó el nombre de una persona para demostrar su inocencia.
El Juez de Garantías Aldo Rau convirtió la aprehensión en detención bajo los cargos de “robo doblemente calificado por poblado y banda, agravado por el uso de arma de fuego y por la calidad de funcionario policial”.
Tras la denuncia de los atracos se dio inicio a una investigación encabezada por Larrarte con la participación de efectivos de la Sub DDI Lobería, DDI Necochea y policías de otras reparticiones. Una fuerte pista los condujo a los cuatro policías como los principales sospechosos. Todos son foráneos y estaban afectados al Operativo Sol cumpliendo funciones en Arenas Verdes y Necochea.
Un allanamiento en la habitación de un hotel ubicado en la villa balnearia que alquilaba el detenido como la requisa de su vehículo Volkswagen Gol, arrojó el resultado de numerosos secuestros: 40 mil pesos, chalecos antibala y de transporte; calzado, una peluca y también se incautaron dosis de cocaína en bochitas de nylon.
En tanto, similar diligencia sucedió en un camping que eligieron otros tres efectivos policiales de los que se sospecha formaban parte de la banda de asaltantes. En esta etapa de la investigación todavía no existen pruebas para solicitar detenciones.
No obstante, este medio tomó conocimiento que la superioridad policial dispuso el retiros de sus armas reglamentarias y el cese de servicio en los lugares que tenían asignados para cumplir funciones.
Cuando ocurrieron los golpes se desarrollaba una tradicional celebración de jóvenes, evento al que fueron afectados casi medio centenar de policías para reforzar la seguridad del balneario Arenas Verdes.
La mayoría de las víctimas (integrantes de familias de Lobería y La Plata) lograron reconocer armas, chalecos y calzados, entre otros elementos que le fueron exhibidos.
Esto último complica la situación del policía que ocupa un calabozo en la sede de la DDI local.
La fiscalía de Delitos Complejos cuenta con los teléfonos celulares de los investigados a la espera de obtener autorización para su análisis, incluida la apertura de antenas de telefonía móvil para determinar cuál era la ubicación de esos aparatos la noche en que se cometieron los robos a mano armada.