Personal de Defensa Civil acudió anoche a la zona de 18 y 51, en un descampado de la ribera de rio Quequén donde un auto se estaba prendiendo fuego.

Vecinos del lugar dieron aviso de una fuerte explosión y de inmediato llegaron los bomberos para sofocar el foco ígneo.

El vehículo quedó totalmente destrozado y, según se informó, había sido robado horas antes de la zona del club Rivadavia.