Shell, la marca de combustibles de la petrolera Raizen, subió desde la medianoche el precio de sus combustibles un 4,3% promedio y de esta forma se sumó a a los incrementos anunciados en los últimos días por el resto de las petroleras que operan en el segmento minorista.
En todos los casos, las subas respondieron a la apreciación del dólar y al avance del precio del crudo Brent, de referencia en el mercado argentino, que viene con una tendencia alcista en las últimas semanas. El barril superó los 72 dólares.
Desde la mañana de ayer, la estatal YPF dispuso un aumento en el precio de sus combustibles del 4% en promedio, dos puntos porcentuales por debajo de la suba que aplicó la privada Axion desde la medianoche del miércoles.
Las marcas YPF, Shell y Axion controlan más del 90% del mercado de combustibles en el segmento de venta al público, y a ellas se sumaron con similar política de aumentos otras compañías del sector como Puma, Dapsa y Gulf.