Un delincuente que había asaltado una carnicería junto a un cómplice se suicidó de un tiro en la cabeza al verse acorralado por la policía bonaerense, en San Justo.

El episodio ocurrió cuando dos ladrones ingresaron al local para robar y escaparon en moto. Luego fueron perseguidos por la policía que, finalmente, logró cercarlos. Uno de ellos resultó herido durante el raid delictivo y el otro, antes de ser detenido, le dijo a los efectivos: “Antes de volver a la tumba, me pegó un tiro”. Luego de sus dichos, el ladrón se disparó en la sien.

En el video captado por las cámaras de seguridad del comercio, se ve cuando los dos delincuentes ingresaron a la carnicería armados para robar la recaudación del local, que está ubicado en José Ingenieros y Ruta 3. Luego de llevarse el dinero, se dieron a la fuga en una moto Yamaha, que más tarde se supo que tenía pedido de secuestro y había sido robado el 18 de febrero de este año.

En las imágenes se puede ver a la dueña del comercio que sale corriendo para pedir ayuda. La mujer se comunicó con el 911 y efectivos de la Policía de la Comisaría Oeste 1º de San Justo indicaron la búsqueda en la zona para dar con los delincuentes. Al localizarlos, en el cruce de las calles Peribebuy y José Ingenieros, los ladrones aceleraron y terminaron chocando, en la intersección de Almafuerte y Las Pampas. Allí comenzó un tiroteo con la policía, donde uno de los delincuentes recibe un disparo en un glúteo.

En ese momento, el ladrón, identificado como Cristian Hernán Gutiérrez de 41 años, decidió entregarse y fue detenido. Sin embargo, su cómplice siguió amenazando a los policías con su arma y, según las declaraciones de los agentes que estaban en el lugar, el delincuente dijo: “Antes de volver a la tumba, me pego un tiro” y luego de esa frase se suicidó.

TN