En el marco de un juicio abreviado, los hermanos Nahuel y Lucas Alcove fueron condenados a cuatro años y dos meses y cuatro años de medio de prisión, respectivamente, por pedido de la fiscalía de Horacio Sirimiarco.

La medida restrictiva de la libertad es de efectivo cumplimiento por lo que continuarán alojados en la Unidad Penitenciaria de Batán donde se encontraban luego de ser detenidos por el hecho.

Ambos fueron hallados culpables del delito de “Homicidio Agravado por uso de arma de fuego en tentativa” contra Lucas Campitelli, a quien le dispararon con un arma de fuego cuando se encontraba realizando trabajados de cortes de césped en una vivienda de Quequén.

El sangriento episodio ocurrió el 21 de marzo de 2023 cuando, por un presunto ajuste de cuentas, los hermanos le dispararon desde una moto a Lucas hiriéndolo de gravedad.

Campitelli fue trasladado a Mar del Plata donde, después de algunas semanas pudo recuperarse. Una de las balas le ingresó por el omóplato y quedó alojada en uno de sus pulmones por lo que el estado de salud era de gravedad.

Los agresores quedaron detenidos, pero luego uno de ellos obtuvo el beneficio de la prisión domiciliara.

Más tarde, la Cámara de Apelaciones hizo lugar al pedido del Fiscal Sirimarco y revocó la prisión domiciliaria dispuesta por el Juzgado de Garantías N° 2 contra uno de ellos.

Durante los allanamientos efectuados en los domicilios de los acusados ubicados en 565 al 2000 y 542 al 2800, y secuestraron municiones de armas calibre 22, 32, 38 y vainas servidas calibre 32.