Un nuevo episodio de inseguridad se vivió ayer en una vivienda de la calle 49 al 3100 en horas de la tarde cuando delincuentes ingresaron a robar creyendo que no había moradores en el lugar.

Tras romper una ventana que da al frente ingresaron a una de las habitaciones y comenzaron a revolver todo en busca de elementos de valor. Sin embargo, en una pieza contigua, se encontraba la nieta del propietario que, en una valiente actitud, les gritó para que se vayan se quedó encerrada para resguardarse.

Los delincuentes se dieron a la fuga no sin antes alzarse con dinero en efectivo que encontraron en el lugar.