Un jubilado de 71 años fue condenado ayer a la pena de cuatro años de prisión por tenencia de estupefacientes para comercialización y tenencia ilegal de arma de guerra. Fue en el marco de un juicio abreviado donde el imputado admitió la culpabilidad en los hechos.
Había sido apresado en septiembre de 2021 cuando, en un allanamiento efectuado en su domicilio de calle 45 entre 96 y 98, efectivos de la DDI secuestraron 39 envoltorios de nylon con cocaína por un peso total de 20,7 gramos, que fueron hallados en la cocina/comedor del domicilio; una balanza de y un arma de fuego calibre 38 marca Custer, con dos municiones intactas en su tambor.
La investigación se inició a raíz de la denuncia de un remisero que advirtió a un agente de la DDI: “che tienen un Kiosco de falopa ahí cerquita de la D.D.I. sobre calle 34″. Se refería de esta forma a un lugar donde se comercializa cocaína al menudeo y donde el trabajador del volante aseguraba llevó ocasionales clientes que lo hicieron esperar a pocos metros.
Con labores de discreta vigilancia, los investigadores observaron maniobras compatibles con la comercialización, que se traducían en el arribo de vehículos que detenían su marcha frente al domicilio, descendiendo alguno de sus ocupantes y luego de mantener un breve dialogo con el propietario del inmueble, realizaban un pasamanos para luego subirse nuevamente al vehículo y retirarse del lugar.
Sin embargo, semanas más tarde, el domicilio apareció totalmente cerrado y se comprobó que el investigado alternaba viviendas para comercializar estupefacientes.
Finalmente, volvieron a encontrarlo en la vivienda de calle 45 donde se hizo el allanamiento que permitió su detención.
Cabe aclarar que el jubilado, apodado “El viejo”, cumplirá la pena con el beneficio de arresto domiciliario debido a su frágil situación de salud.