Por un foco de incendio en el “Jardín de Rocas” del Parque Miguel Lillo, personal de la Dirección de Guardaparques debió prestar rápida intervención ayer para sofocar lo que se podría haber convertido en un siniestro de mayor envergadura, afectando un espacio que es muy utilizado para el esparcimiento y la recreación.
De acuerdo a la información suministrada por el área, alrededor las 9 de la mañana ingresaron diversos llamados telefónicos de emergencia al 105 que daban cuenta de una columna de humo en el sector. Al mismo tiempo, el Cuartel de Bomberos de Necochea se comunicó vía radial con el fin de solicitar se corroborara dicha información.
Inmediatamente, un equipo de la dependencia de la comuna se dirigió hasta el lugar corroborando que se estaba desarrollando un foco de incendio en una parcela de terreno de aproximadamente 15 metros cuadrados, que fue atacado rápidamente con herramientas de mano y mochilas de agua, logrando controlarlo por completo después de alrededor de una hora de trabajo.
Fue causal de este incidente, según pudo conocer el propio personal, una fogata adjudicada a una persona quien, aparentemente, se encuentra en situación de calle y habría iniciado la lumbre para cobijarse del frío.
Asimismo, desde el cuerpo que encabeza Julián Zugazúa se informó que este evento se suma a otros de menor magnitud ocurridos durante el transcurso de los últimos dos fines de semana, y que se tradujeron en actas de infracción labradas por el personal de Guardaparques.
En la mayoría de los casos, los infractores justificaron el encendido del fuego en pleno Parque Miguel Lillo con el objetivo de espantar mosquitos, lo que da cuenta de la falta de conciencia de la población sobre los riesgos que pueden generar dichas conductas.
“Hay personas que piensan que, al haber pasado el verano y descendido la temperatura, ya no hay riesgo de incendio, pero están muy equivocadas”, indicó el director del área. “Si bien el riesgo se reduce, todavía existe, ya que en el ámbito del Parque Miguel Lillo hay muchísimo material combustible totalmente predispuesto para su ignición”, subrayó Zugazúa.
Agradeciendo el llamado de los vecinos e instando a denunciar este tipo de actividades, el titular de Guardaparques señaló que “en este caso no pasó a mayores porque la gente de los edificios que se encuentran frente al Casino dieron aviso inmediato a Bomberos y a nosotros, y afortunadamente logramos llegar a tiempo y sofocar el fuego rápidamente; pero si eso no hubiera sido así hubiera sido mucho más complicado, ya que en esa zona hay mucho pastizal totalmente seco y arbustivas, por donde el fuego avanza muy rápido”.
“Además, esa es una zona de difícil acceso vehicular. Por esa razón es importante que la gente entienda que no se debe prender fuego en los espacios públicos sin importar la época del año”, remarcó el Director del área municipal.
Llamado a la población
Con la finalidad de seguir concientizando y evitar daños mayores que pueden ser producidos por un pequeño descuido o por quebrantar alguna prohibición, Guardaparques recordó los cuidados que se deben tener en cuenta para evitar incendios forestales, y que no siempre tienen que ver con el encendido de una llama:
No arrojar basura. Los plásticos, latas y vidrios pueden actuar como lupa y provocar llamas.
No estacionar sobre pastizales. Los caños de escape, al estar calientes, pueden prender la maleza y generar un incendio.
Apagar bien las colillas de cigarrillo, en lo posible con agua, y no tirarlas al suelo.
No quemar pastizales para hacer limpieza de terrenos.
Además, si alguien está prendiendo fuego fuera de los lugares habilitados, es bueno explicarle los riesgos que está generando y comunicarse con el cuerpo de Guardaparques al instante.
En el caso de encontrar una fogata abandonada es importante intentar apagarla, en lo posible con agua. En su defecto, se puede utilizar tierra o arena y dar aviso a las autoridades.
Finalmente, se recuerda que está prohibido hacer fuego en los espacios público, con excepción de los lugares habilitados a tal fin: fogones de Avenida 2 y Pinolandia y de Avenida Pinolandia entre 2 y 10; camping ubicado en Avenida 2 y la prolongación imaginaria de calle 111; complejos sindicales ubicados en Avenida 10 desde calle 183 hasta calle 207; y clubes y complejos ubicados en la ribera del Río Quequén.
Aun así, cuando se encienda una fogata en lugares habilitados, es importante nunca quitarle atención o dejarla sola, tener en cuenta la dirección e intensidad del viento, asegurarse de que los alrededores del fogón estén limpios y libres de pasto seco, malezas, cortezas, pinocha o cualquier otro elemento inflamable y, después de utilizarla, apagarla con abundante agua y asegurarse que no queden brasas.
Desde el área que depende de la Secretaría de Gobierno dejaron los números telefónicos, y totalmente gratuitos, para comunicarse en el caso de observar algún foco de incendio o situación irregular: 105 de Guardaparques, 100 de Bomberos o 103 de Defensa Civil.