La Parroquia Santa Teresita, ubicada en la calle 55 entre 94 y 96, sufrió el robo de los reflectores que iluminaban el patio del templo.
Este hecho generó preocupación entre los miembros de la comunidad, ya que afectaba tanto la seguridad como las actividades que se realizan en el lugar.
Afortunadamente, ayer, los reflectores fueron colocados nuevamente.
Además, se instalaron protectores especiales con el objetivo de asegurar su durabilidad y prevenir futuros robos o daños.