La DDI dio a conocer en la tarde de este sábado más detalles del allanamiento que ayer adelantó Tsn Necochea donde se secuestraron decenas de celulares robados.

Desde la dependencia, informaron que la primera denuncia fue hecha en febrero, cuando un vecino acusó el robo de dos teléfonos celulares Iphone que habían quedado en el interior de su auto estacionado en 2 y 191 y que desconocidos sustrajeron forzando las cerraduras del rodado.

Junto con la fiscalía 1, de José Luis Cipolletti, se realizaron distintas tareas investigativas, entre las cuales, por ejemplo, chequearon los lugares de referencia que iba arrojando el sistema de geolocalización de los equipos móviles, pero sin lograr resultados de relevancia.

Esto hasta que semanas atrás el sistema de geolocalización informó que uno de los equipos celulares se encontraba en un domicilio de la calle 16 al 2800 de esta ciudad.

A partir de allí se montaron seguimientos y vigilancias de encubierto con el objeto de determinar la veracidad del “dato”. Con el transcurrir de los días los investigadores descubrieron que en la vivienda compraban celulares de alta gama para reinsertarlos en el mercado negro de telefonía celular.

Allanamiento en una vivienda de la calle 16

Con estos elementos la fiscalía de intervención solicitó al Juzgado de Garantías 1 una Orden de Allanamiento para la vivienda investigada. Una vez con la Orden judicial, los agentes ingresaron a la propiedad y se encontraron con que, en uno de los ambientes de la casa, habían montado un laboratorio donde desbloqueaban y liberaban los equipos tecnológicos para luego ser reducidos e insertados en el marcado negro.

Allanamiento en una vivienda de la calle 16

Como resultado del allanamiento se procedió al secuestro de 31 teléfonos celulares marca Iphone y Samsung, todos ellos de alta gama, entre los cuales se encuentran uno de los equipos que originó la investigación y otro robado en otro hecho. También se secuestró dos Macbook, un Ipod, cuatro consolas de juegos Play Station III y IV.

Estos elementos, en su conjunto, representan un millonario botín. Asimismo, en el marco de la causa, se imputó a dos hombres de 25 y 35 años por el delito de encubrimiento, quienes por el momento continúan en libertad. Con este vuelco en la investigación no se descartan nuevas medidas judiciales/policiales.