El rescate financiero de Estados Unidos a la Argentina, materializado en una compra directa de pesos y un swap de divisas por US$20.000 millones, está generando una fuerte controversia en Washington. Según una investigación del diario The New York Times, la medida beneficiará directamente a grandes inversores internacionales y acaudalados gestores de fondos de cobertura que tienen estrechos vínculos con el secretario del Tesoro, Scott Bessent.

La publicación pone en duda el verdadero objetivo del rescate, sugiriendo que podría estar diseñado para ayudar a “inversores ricos cuyas apuestas en Argentina podrían tambalearse si su economía se hunde”.

Los beneficiados: amigos de Bessent y gigantes de Wall Street

El artículo, firmado por los periodistas Alan Rappeport y Maria Abi-Habib, señala que importantes fondos de cobertura, “incluidos los dirigidos por amigos de Bessent”, se beneficiarán financieramente con la ayuda económica a la Argentina.

Entre los mencionados se encuentran gigantes como BlackRock, Fidelity y Pimco, que están fuertemente invertidos en el país. También se nombra a inversores como Stanley Druckenmiller y Robert Citrone, quienes trabajaron con Bessent en el pasado cuando éste era inversor para George Soros.

La intervención del Tesoro ya tuvo un efecto positivo inmediato en los mercados: los bonos argentinos repuntaron y el peso se fortaleció tras el anuncio.

Críticas y vientos políticos en contra

La decisión de la administración Trump de auxiliar a la Argentina ha provocado duras críticas, especialmente por el momento en que se produce: mientras el gobierno de Estados Unidos se encuentra parcialmente cerrado (shutdown) y los agricultores locales esperan su propio paquete de ayuda.

“Es inexplicable que el presidente Trump esté apoyando a un gobierno extranjero, mientras cierra el nuestro”, declaró la senadora demócrata Elizabeth Warren. La legisladora, junto a otros siete senadores de su partido, presentó un proyecto de ley para impedir que el Departamento del Tesoro utilice su Fondo de Estabilización Cambiaria para este fin.

“Trump prometió ‘Estados Unidos primero’, pero se está poniendo a sí mismo y a sus amigos multimillonarios en primer lugar y está pasando la factura a los estadounidenses”, sentenció Warren. Aunque es poco probable que la ley se apruebe, la controversia expone los costos políticos que la ayuda a Argentina podría generar para el gobierno republicano.