El FMI consideró que el “plan de estabilización” que puso en marcha el Gobierno argentino “está obteniendo mejores resultados de lo esperado”, pero estimó necesaria una flexibilización del tipo de cambio.
Así lo resaltó este jueves la vocera del organismo, Julie Kozack, para quien en el país “ha habido un rápido cambio en las reservas internacionales, una mejora en el equilibrio del Banco Central y una rápida reducción de la inflación, específicamente en la inflación mensual, ya que en abril alcanzó el 8,8%”.
“Esperamos que la economía comience a crecer nuevamente en la segunda mitad de este año”, estimó la funcionaria, en una conferencia de prensa que brindó en Washington.
En ese marco, subrayó que “es importante mejorar la calidad de la consolidación fiscal para asegurar su estabilidad y que sea justo”.
En ese sentido, destacó que las metas del acuerdo con el Fondo Monetario “fueron cumplidas”, por lo cual ahora es necesario que “la asistencia social sea suficiente y esté bien orientada para proteger a los más vulnerables, y también para garantizar que la carga de la consolidación fiscal no recaiga desproporcionadamente en los trabajadores”.
En cuanto a la política monetaria, evaluó: “tendrá que seguir evolucionando para mantener la inflación y las expectativas. Y sus efectos tendrán que volverse más flexibles con el tiempo para salvaguardar una mejora en la cobertura de reservas”.
En diciembre, cuando asumió, el Gobierno dispuso una devaluación del 2% mensual, ritmo que se mantiene en la actualidad, aunque numerosos analistas hablan cada vez con mayor insistencia de un “atraso cambiario“.
“Estos cambios en las políticas serán necesarios al tiempo que los controles cambiarios sean levantados gradualmente, según las condiciones, y mientras las autoridades hacen la transición a un nuevo régimen monetario. En este caso, ese régimen incluye la competencia de monedas, en el que el peso y otras monedas, como el dólar, pueden coexistir y son libremente usables. Otros países de la región, como Uruguay y Perú, tienen sistemas como este”, puntualizó la funcionaria.
También, Kozack estimó conveniente “desbloquear las barreras de entrada para que las empresas promuevan el empleo formal en la economía y también se atraiga la inversión privada”.
Por último, la portavoz confirmó que el directorio del FMI se reunirá en las próximas semanas para aprobar la octava revisión del acuerdo con la Argentina, que para el país significará un desembolso de casi US$800 millones.