Una encuesta dada a conocer este fin de semana confirma que a pesar de la innegable crisis económica, el presidente Javier Milei conserva una importante adhesión entre la ciudadanía. Al mismo tiempo, del estudio realizado por la consultora privada Equipo Mide entre el 2 y el 6 de septiembre, cristaliza la acefalía de la oposición, carente de una figura central que canalice el malestar de una importante parte de la sociedad.

La imagen de Milei se presenta dividida, pero aún conserva un 48% de imagen positiva, contra un 51% de imagen negativa. Nada mal teniendo en cuenta el fuerte ajuste que aplica la administración libertaria. El mandatario nacional cuenta con esa adhesión a pesar de su particular estilo y sus formas, un aspecto que es rechazado por el 62% de los encuestados.

Incluso el porcentaje en favor del economista sube cuando se le pregunta a los encuestados sobre su capacidad para resolver los problemas del país. En este punto un 49% lo considera capaz, uno por ciento más que su imagen positiva. En este punto en particular se nota como la polarización la “la casta” sigue dándole frutos a la administración libertaria. El 21% de los entrevistados cree que Milei sabe como resolver los problemas del país, pero no lo deja “la casta”.

Una oposición acéfala

Con respecto al liderazgo opositor, sigue primera la ex presidente Cristina Fernández de Kirchner, como la principal líder de la oposición con un 20%. Pero el verdadero primer lugar se lo lleva el casillero Ninguno. Para el 50% de los entrevistados, la oposición está acéfala.

Axel Kicillof la sigue de cerca a Cristina, con el 18%. El resto, muy pero muy lejos: Juan Grabois Sergio Tomás Massa con el 3%, Martín Lousteau con 2 y cierra Juan Schiaretti con el 1%.

Preocupaciones, expectativas y emociones

Este estudio de alcance nacional deja otras conclusiones que tienen que ver con las preocupaciones, las expectativas y los emociones de los argentinos en la actualidad.

La pobreza es la principal preocupación de los entrevistados, desplazando a la inflación por cuarto mes consecutivo. De todos modos la inflación no se retira del todo, conservando un segundo lugar. El podio de las preocupaciones lo completa, como viene siendo costumbre de un tiempo a esta parte, la inseguridad.

En lo estrictamente económico, las expectativas sobre el futuro del país en los próximos seis meses son negativas, con un 41% que considera que va estar peor que ahora y un 28% que va a estar mejor que ahora. Mientras que las expectativas sobre la situación personal son más negativas que positivas, con un 30% que considera que va estar peor que ahora y un 25% que cree que va a estar mejor.

El estudio también le preguntó a los entrevistados sobre sus emociones. Para un 43% de la población las emociones predominantes son negativas como bronca, enojo, miedo y desilusión. Mientras que para un 32% son positivas, entre las que se destacan, esperanza, confianza y alegría). Para un 22% reina la incertidumbre.