El Tribunal de Casación Penal bonaerense anuló el juicio por jurados y el veredicto que declaró “no culpables” a tres jóvenes acusados de una violación en manada de una adolescente de 14 años en un camping de la localidad balnearia de Miramar en 2019, en un fallo en el que cuestionó duramente al tribunal que condujo el debate y que pidió que se realizara un nuevo proceso, informaron fuentes judiciales.
La Sala III del tribunal, integrada por los jueces Ricardo Borinsky y Víctor Violini, hizo lugar a un planteo presentado en ese sentido por los abogados de la víctima, y consideró que en el proceso hubo “un claro avasallamiento a los derechos” de la joven .
En un fallo de nueve páginas los magistrados dispusieron la nulidad del juicio que culminó el 17 de septiembre pasado y que consideró que Lucas Pitman (24), Tomás Jaime (26) y Juan Cruz Villalba (25) no eran responsables penalmente del delito de “abuso sexual con acceso carnal agravado por la participación de dos o más personas” por el que estaban imputados.
En ese sentido, ordenaron que se lleve adelante un nuevo proceso bajo el mismo formato, pero a partir de la conformación de un jurado ciudadano con nuevos integrantes, aunque la familia de la víctima pedirá que sean juzgados por un “tribunal técnico”.
El juicio por jurados realizado a los acusados y el veredicto obtenido tras cuatro jornadas de audiencias en el Teatro Auditorium de Mar del Plata había motivado un recurso de queja por parte de los abogados de la chica, Maximiliano Orsini y Juan Pablo Gallego, quienes consideraron que presentaba una “insalvable nulidad”.
Entre los cuestionamientos planteados, los abogados subrayaban en su recurso la no intervención “necesaria en el juicio” de la asesora de Menores e Incapaces, “a la que se le negó su participación esencial” durante la declaración de la víctima “en condiciones de grave indefensión”.
Al respecto, los jueces de la Sala III sostuvieron que “sin lugar a dudas”, la decisión del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 3 de Mar del Plata, que condujo el juicio, de “negar intervención” a la asesora “ha supuesto un claro avasallamiento a los derechos reconocidos a la joven víctima a contar con la asistencia especializada”.
“La negada intervención de la Asesora de Incapaces, entonces, quien fue relegada de su rol de representante de los derechos de la menor víctima a la de una mera espectadora en el juicio en el que la joven fue interrogada sin asistencia alguna, supone una violación del debido proceso, que conduce necesariamente a la nulidad del juicio”, señalaron.
El abogado Orsini dijo que para Casación “no se cumplió el artículo 202 del Código Procesal respecto a que la adolescente declaró sin la presencia de una psicóloga especialista en abuso, no se hizo una entrevista previa para ver si estaba en condiciones de declarar y no aceptaron la intervención de la Asesora”.
“Nosotros habíamos hablado de falta de perspectiva de género en el jurado y que hubo contaminación del jurado por parte de los defensores en forma ilegítima porque había una restricción para no hablar de la vida de la menor y hablaron de la vida de la menor, le faltaron el respeto a ella y a su familia”, aseguró el letrado, quien sostuvo que esos “agravios no están en el fallo”.
A partir de estos fundamentos, pidieron que el TOC 3 dispusiera la realización de un nuevo juicio, para el que se será necesario la convocatoria de otros doce jurados.
Sin embargo, Orsini insistió en que el juicio por jurados es “inconstitucional para menores de edad abusados sexualmente porque colisiona con la Convención Internacional de los Derechos del Niño y de Belém do Pará que hablan de que el menor tiene la posibilidad de apelar un fallo absolutorio de su abusador”.
“Entonces vamos a ir a la Corte Suprema para que analice esta cuestión y que determine si tiene que volver a un jurado, nosotros entendemos que no porque la gente está contaminada con el tema con las redes sociales y con todo lo que han pasado en los medios, entonces tienen que ser juzgados por un Tribunal técnico, eso es lo que pedimos”, concluyó.
De acuerdo con la instrucción del caso, que estuvo a cargo de la fiscal Florencia Salas, Pitman, Jaime y Villalba fueron acusados de haber abusado sexualmente de la adolescente entre las 4 y las 6 del 1 de enero de 2019 en el Camping “El Durazno”, ubicado sobre la ruta 11 en el ingreso a Miramar, aprovechándose de la edad” de ella y de que “no podía consentir libremente el accionar”.
Los imputados fueron detenidos tras una denuncia radicada por la menor, junto a su madre, en la Comisaría de la Mujer de Miramar, y estuvieron alojados en la Unidad Penal 44 de Batán hasta el 3 de mayo de 2019, cuando se les otorgó el beneficio del arresto domiciliario con monitoreo electrónico.
Esa morigeración quedó sin efecto días antes del juicio, a partir de un pedido de la familia de la adolescente, que solicitó que fueran excarcelados para evitar que siguieran computando tiempo como parte de una eventual sentencia.