Son horas decisivas en el caso Facundo, el joven oriundo de la localidad de Pedro Luro que desapareció el pasado 30 de abril cuando hacía dedo en la Ruta 3 y apareció muerto cuatro meses después en un cangrejal en la localidad de Villarino Viejo, una zona inaccesible y muy poco transitada.

Este jueves 1 de octubre, el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) y demás peritos que trabajaron en el cuerpo, entregarán el informe final de la autopsia. La importancia de este estudio reside en que podría conocerse cómo y cuándo murió el joven de 22 años.

 “El informe lo recibirá la jueza (María Gabriela Marrón) mañana a las 9 de la mañana. Entre esa hora y las 15 hs esperamos conocer los resultados”, dijo uno de los abogados de la causa, Luciano Peretto.

En los últimos días, la preocupación respecto a que el informe final no brinde demasiada información se instaló en los organismos de Derechos Humanos y en la propia madre del joven, Cristina Castro. Para una fuente que consultó este medio “es posible que no arroje demasiada información por las condiciones en las que se encontró el cuerpo”, pero de todas formas cree que eso “es algo que no vamos a saber hasta mañana”.

“Lo más importante es conocer la mecánica de muerte y en el ámbito (o los ámbitos) en los que estuvo”, agregó la especialista en el caso, mientras que hizo foco sobre el estudio de diatomeas, uno de los indicios más comunes para saber si un cuerpo murió por sumersión, es decir, ahogado.

El caso apunta centralmente a la policía bonaerense, que fue quien lo detuvo en al menos tres oportunidades y una serie de pruebas la dejan mal parada. Entre ellas, la aparición de dos amuletos que Facundo llevaba a la hora de desaparecer, que relacionan a la fuerza. Uno fue hallado en un galpón de la comisaría de Teniente Origone y otro en el baúl de un móvil que estuvo en la zona donde apareció su cuerpo.