El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, se reunirá el jueves en La Plata con intendentes de Juntos por el Cambio con el objetivo de destrabar el debate legislativo del proyecto de ley Impositiva 2020, luego de que la semana pasada se cayera su tratamiento en el Senado provincial por falta de quórum de la oposición.
El encuentro estaba pautado desde antes que se frenara la aprobación de la iniciativa oficial, e iba a ser similar a la reunión ya mantenida con jefes comunales oficialistas, pero el actual escenario hace prever como tema excluyente del encuentro la negociación de la aprobación del proyecto de ley impositiva.
“No hay un impuestazo para la clase media, que es uno de los sectores más dañados después de cuatro años”, se cansó de explicar el gobernador por distintos medios periodísticos, luego de que la oposición no diera quórum bajo el argumento que la iniciativa implicaba un “impuestazo” con incrementos de hasta el 75 por ciento.
Kicillof sostuvo enfáticamente que sólo sufrirán un aumento de ese porcentaje “unos 200 contribuyentes propietarios de más de 2.000 hectáreas”.
El gobernador acusó a la oposición de Juntos por el Cambio de “jugar al circo político”, y responsabilizó puntualmente al intendente del partido bonaerense de Vicente López, Jorge Macri, por la decisión de “romper las negociaciones en curso” en torno a la ley impositiva promovida por el oficialismo.
Kicillof sostuvo que insistirá con la “interlocución” de la ex gobernadora María Eugenia Vidal en la negociación -pese a que se encuentra fuera del país- y recordó, en declaraciones a radio El Destape, que “la semana anterior al tratamiento de la ley impositiva tratamos las leyes de emergencia en un entendimiento con los opositores, y Vidal, que llevó adelante la negociación, quería que no se dijera emergencias porque dejaba en evidencia que dejaron la provincia como tierra arrasada”.
“La oposición, lejos de ser constructiva, creo que decidió un posicionamiento valiéndose de una mayoría que tiene en el Senado”, aseveró el mandatario bonaerense, y declaró que va a “insistir con la ex gobernadora porque ese es el papel que ella, de alguna manera, se había marcado cuando tuvimos las charlas”.
“Necesitamos recursos para recuperar la salud y la educación en la Provincia. No vamos a dañar a la clase media, todo lo contrario, queremos levantar la economía de la provincia, pero necesitamos que la oposición se siente a debatir esta ley”, reclamó Kicillof.
Tras el freno a la aprobación legislativa, muchos fueron los sectores políticos y gremiales que criticaron la falta de quórum de parte de la oposición y reclamaron la sanción de la ley para permitir a la provincia contar con financiamiento para afrontar gastos y pagos de deuda previstos.
Ayer, Kicillof almorzó con el presidente de la Cámara de Diputados nacional, Sergio Massa, y con el resto de la mesa de acción política bonaerense del Frente de Todos para estudiar distintas variantes que apunten a destrabar la ley Impositiva en la Legislatura provincial.
Una fuente cercana confió que “el proyecto que se enviará a la Cámara de Diputados será el mismo que ingresó por Senado, en todo caso, las modificaciones se harían sobre tablas”.
Por cuestiones reglamentarias, la sesión en Diputados bonaerense recién puede concretarse la semana próxima, estimándose como fecha probable el 7 u 8 de enero próximos.
Desde la oposición, tanto legisladores como intendentes de Cambiemos expresaron en declaraciones periodísticas “predisposición” para facilitarle al gobernador “los instrumentos necesarios para gobernar” pero, en lo que atañe a la cuestión impositiva, abogaron por la definición de una “ley de consenso”.
La diputada provincial Maricel Etchecoin (CC ARI-Juntos por el Cambio) consideró que el proyecto de reforma tributaria constituye “un golpe directo al bolsillo de los bonaerenses”, y le reclamó al oficialismo el impulso de “un debate serio y responsable” sobre una “iniciativa consensuada”.