Para el viceministro de Salud bonaerense, las “marchas y aperturas” hicieron que haya menos cuidado y aumentaran los casos. Descartó la posibilidad de la vuelta a clases presenciales de alumnos y alumnos que no tienen conectividad.
El viceministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak, dijo que el país está en una situación complicada por haber superado los 10 mil contagios, y explicó que si bien se atravesaba un amesetamiento en la curva de contagios, las “marchas y aperturas” hicieron que haya menos cuidado y aumentaran los casos.
Por otro lado, el funcionario descartó la posibilidad de que el distrito promueva la vuelta a clases presenciales de alumnos y alumnos que no tienen conectividad -como pretendía hacerlo la Ciudad de Buenos Aires pero finalmente no properó por la no aprobación de los protocolos por parte de Nación- porque implicaría “exponerlos a un mayor riesgo”.
“La provincia está en una situación complicada, todo el país lo está, superamos los 10 mil casos en el país. Comparativamente, la provincia está bien porque el sistema de salud se preparó mucho”, dio hoy el funcionario en declaraciones a la radio online FutuRöck.
Además, Kreplak apuntó que el número de casos está aumentando, y se refleja en que el 10% de los casos son del interior de la provincia.
“Hubo una meseta hace unas semanas, pero después hubo aperturas y marchas, y siete o diez días después eso, se reflejó en un aumento de los casos. Es evidente; se sabe que la gente se contagia cuando se encuentra con otras personas”, remarcó.
En ese punto, el viceministro aclaró que la suba no fue responsabilidad de la movilización del 17 de agosto, ya que consideró que la misma “fue escasa”, pero sí dijo que, “a partir de la movilización, se instala una lógica de menos cuidado, y, junto con la movilización, se produjeron aperturas de centros comerciales y se habla sobre el fracaso del aislamiento”.
“Yo creo que en todo ese mensaje que se valida con la dirigencia política y los medios avalando una marcha, hay menos pautas de cuidado y esa es la razón que cuando habíamos estabilizado en el AMBA ahora vuelve a subir, sube en la Ciudad y conurbano”, dijo Kreplak.
En ese marco, indicó que si bien las camas de terapia intensiva continúan estables, “la situación es de franco crecimiento”.
“La expectativa de amesetamiento que teníamos desde hacía unos días, se destruyó por la falta de cuidados”, completó.
Descartó en esa línea una mayor apertura de actividades, y advirtió: “Pensemos que hay un porcentaje de la sociedad, aproximadamente el 50 o 40% que no se está movilizando. Ese porcentaje de la población ha salvado al resto, pero si cambiara esto y todos salieran a la calle, esto puede incrementarse”.
Al ser consultado sobre la vuelta a las clases, luego de que se rechazara el protocolo presentado por el Ministerio de Educación porteño, rechazado por las autoridades nacionales, Kreplak entendió que se trata de “una discusión de fondo muy fuerte”.
“Si uno piensa que los chicos, por no tener acceso a la tecnología o un servicio costoso, tienen que someterse a mayor riesgo, tenemos una discusión de fondo muy fuerte”, indicó.
“Lo que en Ciudad es del 5% de los chicos, en la provincia de Buenos Aires es del 30%, nosotros lo que hicimos fue imprimir más de 10 millones de cuadernillos y docentes que lo alcanzaron a los domicilios. Es un trabajo territorial muy fuerte para que los chicos puedan continuar con la educación hasta que podamos garantizar que la conectividad sea un servicio básico para toda la ciudadanía”, dijo Kreplak.
Y remarcó: “De ninguna manera podemos reemplazar esa asimetría e inequidad social poniendo en mayor riesgo a los chicos y a su familia”.