El gobierno de María Eugenia Vidal autorizó un nuevo aumento de las tarifas eléctricas para los usuarios de las distribuidoras EDELAP, EDEA, EDEN, EDES y las 200 cooperativas que operan en el territorio de la Provincia.
Vidal, a través de una resolución firmada por el ministro de Infraestructura, Roberto Gigante (la 1713 de 2019) autorizó aumentos de 25 por ciento promedio que entran en vigencia a partir del 1º de enero de 2020.
Se trata del aumento que, por contrato, debió haberse autorizado en agosto, pero que razones políticas (electorales) fueron posponiendo, como ocurrió con el resto de los servicios.
Lo cierto es que si no media un cambio de planes, desde el 1º de enero los usuarios residenciales pagarán $ 3.53 el kilowatt hora, contra los 3.20 que se pagan hoy, en tanto que los cargos fijos se incrementarán más de 40 por ciento para ubicarse en $121.26 para usuarios residenciales.
Se estima que desde 2015, las tarifas de las distribuidoras bonaerenses crecieron más de 3 mil por ciento. Con las nuevas autorizaciones, esa proporción quedará muy cerca del 4 mil por ciento, es decir que los valores inscriptos en las boletas se multiplicaron por 10 en cada uno de los años de la gestión de Cambiemos.
Ya en julio de este año Vidal había admitido que eran necesarios nuevos aumentos para “sincerar” el 100 por ciento de los costos. “Creo que el 75 por ciento de la tarifa está sincerada, con lo cual no vamos a vivir en una segunda etapa de gobierno grandes aumentos”, dijo en una entrevista concedida a la agencia DIB. Y admitió que, aunque “el mayor esfuerzo está hecho”, habrá “aumentos en razón de la inflación y un poco por lo que queda del subsidio a la generación”.
En el texto de la resolución, Vidal y Gigante garantizan a las distribuidoras seguir percibiendo los beneficios del Incremento de Costos Tarifarios (ICT) “hasta que se recuperen las diferencias no obtenidas por el periodo 1° de enero de 2019 al 31 de diciembre de 2019”.