A partir del 1° de octubre y hasta el 15 de noviembre, el Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires pondrá en marcha la Campaña Nacional de Vacunación contra el sarampión, la rubéola, las paperas y la poliomielitis.
Según informó la cartera sanitaria a través de un comunicado, la inmunización será destinada a niños y niñas de uno a cuatro años inclusive, quienes recibirán una dosis extra de la vacuna Triple Viral.
Además, desde el organismo instaron a la comunidad a verificar y completar los esquemas del Calendario de Vacunación, y a los Equipos de Salud a profundizar la vigilancia epidemiológica y notificar los casos sospechosos.
Bajo el lema “Vamos a Vacunarnos”, el objetivo de la nueva campaña es mantener la eliminación que se logró en el país de sarampión, rubéola, síndrome de rubéola congénita y poliomielitis.
“Estas enfermedades, que son muy contagiosas y graves, se pueden prevenir con vacunas gratuitas y obligatorias, que están disponibles en todos los vacunatorios del territorio bonaerense”, recalcaron.
A su vez, recordaron que el sarampión es una enfermedad viral que se contagia fácilmente por vía respiratoria y se manifiesta con manchas en la piel y fiebre y que los mayores de 13 meses, adolescentes y personas nacidas después de 1965 deben acreditar dos dosis.
Vale mencionar que la cobertura de vacunación en Argentina registró un descenso gradual y progresivo en el período 2015 y 2019, que se acrecentó por la pandemia de coronavirus. Por eso, se realizarán estrategias de vacunación en jardines y otras instituciones donde transitan niños y niñas.
Las vacunas estarán disponibles en cualquier vacunatorio de la provincia de Buenos Aires, tanto en los Centros de Vacunación regulares como en los Vacunatorios de la Campaña Covid-19. Tanto estas como las del coronavirus y cualquier otra del calendario pueden aplicarse en forma simultánea.
La cartera sanitaria insta también a los Equipos de Salud intensificar la vigilancia epidemiológica de toda enfermedad febril exantemática (EFE) y notificar rápidamente dentro de las 24 horas de la sospecha e implementar acciones de control para evitar su propagación.
Se trata de un caso sospecho de enfermedad febril exantemática cuando todo paciente de cualquier edad, con fiebre (mayor a 38° C) y exantema o bien que un trabajador de la salud sospeche de sarampión.