Para mitigar el impacto económico de la sequía en el campo y en las arcas públicas, el Gobierno anunció la semana pasada el nuevo “dólar agro”, un tipo de cambio diferencial y fijo de $ 300 para sostener a los sectores más golpeados e incentivar la liquidación de exportaciones de soja y otros productos de economías regionales.
Tras conocerse está medida ciudadanos de nuestra ciudad vinculados al campo dieron su opinión a TSN Necochea.
El productor Ernesto Mancino, aseguró que “el dólar soja 3 y agro el alcance es bastante limitado hasta ahora y no ha habido mucho movimiento por lo confuso de la norma, no ha sido claro como se ha implementado y a su vez se encuentra con un escollo difícil de salvar, que más allá del tipo de cambio que pongan lo que no está es la soja”.
Luego agregó que “cada vez las estimaciones de rindes son más bajas y de alguna manera el sudeste bonaerense tiene algo de soja de segunda, con alguna potencialidad, para juntar alguna tonelada más para el país pero no mucho más”.
Dejo en claro que “por más dolar soja que implementen no están las toneladas de producción que sabemos tener en Argentina”.
A raíz de esto consideró que “van a tener que ampliarlo a otros productos, como por ejemplo, el maíz, el girasol, la cebada y el trigo porque si no, no se va a lograr el objetivo”.
Más allá de eso indicó que “todavía no han llegado los tiempos de cosecha. Falta para que ingrese la soja de segunda y bastante más para el maíz. Estamos expectantes en cómo se resuelve esta situación pero no ha sido una ayuda para el productor”.
“Se está buscando mayor ingreso de divisas”
Por su parte, Esteban Bilbao, ingeniero agrónomo, consideró que “la realidad es que no es una ayuda al productor, sino que lo que se está buscando es mayor ingreso de divisas que hasta ahora no se está logrando tampoco”.
Con esta medida, consideró que “aumenta lo que es la presión sobre los alquileres de los campos, por eso los dueños de los campos están pidiendo que se pague el precio del dólar soja y eso desfavorece a los productores y sobre todos a los productores de zona como la nuestra, en el sudeste bonaerense, donde se hace muy poca soja”.
Con respecto al cultivo indicó que “en otras zonas se está en plena época de cosecha de una soja que está muy mala, por la sequía mientras que en nuestra zona está por empezar la cosecha de soja y la realidad es que el productor está muy ajustado por la mala cosecha de trigo y cebada”.
A raíz de esto considero que “tiene que vender para pagar las deudas y financiarse para la campaña que viene”.
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Finalizó afirmando que “más que ayudar, se sigue embarrando la cancha, cambiando las reglas continuamente y no pudiendo planificar ni trabajar en una forma ordenada en la producción agropecuaria”.
La medida comenzó a regir el lunes pasado. A través de los decretos 193/2023 y 194/2023, publicados en la última edición del Boletín Oficial, se establece que el tipo de cambio diferencial para el complejo sojero regirá hasta el 31 de mayo. En tanto que el destinado a las economías regionales estará vigente hasta el 31 de agosto.