Los episodios de violencia no cesan en la actividad doméstica
Nada parece detener la violencia dentro y fuera de las canchas de fútbol de nuestro distrito, especialmente en las de Necochea y Quequén donde cada vez es más frecuente algún tipo de ejercicio de la violencia y la agresión.
Peleas dentro del campo de juego y fuera; jugadores, árbitros, asistentes, cuerpo técnico, personal de los clubes, periodistas, publico, policía, barras…, todos en algún momento se han visto agredidos e involucrados de alguna manera por la violencia reinante que genera e impregna un deporte que cada vez está más podrido.
Ya lo había remarcado Gustavo Guerra, el número dos de la Agencia de Violencia en el Deporte (APREVIDE) cuando estuvo de visita en nuestra ciudad en noviembre del año pasado luego de algunos episodios de violencia que habían motivado a que concurriera a Necochea para intentar que desde la Liga instrumentaran algún tipo de mecanismo que frenara la creciente agresión del fútbol.
En aquel momento, había un pedido expreso por parte del Ministro de Seguridad que estaba a cargo de Carlos Ritondo y por parte de la Gobernadora María Eugenia Vidal de poner foco en las situaciones violentas dentro del deporte federado e intentar resolver de alguna manera estos episodios.
A un año de aquella visita y culminando el año ninguno de esos objetivos parecen haberse cumplidos, especialmente en el tramo último del campeonato que organiza la Liga Necochea de Fútbol donde en la final de la Reserva que se disputó este sábado en el Carlos Cuomo de la ciudad de Quequén jugaban la definición del título los dos equipos de la ciudad, el local Estación Quequén ante Ministerio de Obras Públicas.
Este encuentro era el último ya que una semana atrás se había disputado el de Ida donde Ministerio había derrotado por la mínima al “Verde” y en esta revancha el “Mini” con solo igualar ya era campeón, objetivo que logró ya que también ganó una vez más por la mínima coronándose campeón de la categoría.
Lo que debería haber sido un festejo pleno para la visita no pudo completarse puesto que a minutos del final del encuentro comenzó a entrar público de Estación Quequén por la puerta que usa la parcialidad visitante para ingresar al estadio que está contigua a las cabinas de transmisión que dan a la calle 561.
Cabe destacar que allí no había presencia policial y una vez ingresado ese número de personas traspasaron luego el pulmón que divide la zona de los vestuarios para finalmente ingresar al campo de juego.
Sin tener en claro aun como sucedió, una vez que esas personas ingresaron al césped comenzó una serie de corridas, peleas, empujones y agresiones, entre ellas al árbitro Cristian Pirosanto quien tuvo que correr para resguardar su integridad física, cosa que logró a medias ya que fue alcanzado por algunas patadas criminales tal como se ve en las imágenes de video que gentilmente compartió con este medio la página Abrazo de Gol del relator Leandro Aroza, quien estaba presente en el estadio junto con su parte de equipo de trabajo.
La reyerta duró varios minutos y no se puede explicar que nadie hizo nada para frenar esto, la irresponsabilidad por parte de la seguridad del estadio es alarmante, debe recordarse que no hace mucho días atrás, el domingo 3 de noviembre cuando se jugó el primer partido entre la primera de Estación frente a Independiente de Lobería perteneciente al ascenso, luego de los 90´ la parcialidad local agredió a la hinchada visitante de Lobería, hecho que produjo roturas en vehículos y personas lesionadas como un particular que tuvo que ser atendido en el hospital, sutura mediante, al recibir un piedrazo que ingreso por la parte posterior de su camioneta y lo lastimó.
El bochorno, del que aún faltan conocer detalles, podría haber sido mucho más grave ya que la gran cantidad de personas que ingresaron al campo de juego no deberían haber llegado nunca allí, y en su defecto alguien debió retirarlos rápidamente y si algo más grave no sucedió es porque la terna arbitral, entre otros tuvo que defenderse como pudo sin que nadie preparado para tal suceso interviniera.
Hoy domingo se juega la final más importante de fútbol en nuestra ciudad entre Mataderos e Independiente de San Cayetano esperando que sea una fiesta del deporte y no otra cosa.