Cristiano Ronaldo ganó casi todo como jugador, solo le faltó un mundial, quizás si hubiera nacido en otro país hubiera podido lograr ese objetivo. Pero a lo largo de su carrera le quedaron pocas cosas por festejar.

Y a los 39 años, jugando una liga menor como la árabe, Cristiano Ronaldo volvió a mostrar que su hambre de gloria no se termina, quiere seguir ganando y cuando no lo hace llora, como un chico, como alguien que nunca consiguió un título.

Al-Hilal derrotó por 5 a 4 en los penales al Al-Nassr, de Cristiano Ronaldo, tras haber igualado 1 a 1 en el tiempo reglamentario, y obtuvo el título de la Copa del Rey de Campeones de Arabia Saudita.

El astro portugués, que solo ha ganado el Campeonato de Clubes Árabes 2023 desde su llegada, rompió en llanto después de la dolorosa derrota.

Con el arquero Bono como héroe absoluto, los dirigidos por el portugués Luis Castro encontraron una rápida ventaja con el gol del serbio Aleksandar Mitrovic a los 7 minutos.

Con el marcador en contra, el Al-Nassr intentó buscar el empate pero en el inicio del complemento sufrió la expulsión de su arquero, David Ospina, por lo que tuvo que completar el duelo con un hombre menos.

Pero en los últimos minutos pasó de todo, Al Bulayhi fue expulsado de manera infantil por el árbitro argentino Darío Herrera y el equipo de Cristiano Ronaldo llegó al empate a través de la pelota parada, luego de un envío al área desde un lateral para que Ahmed, de cabeza, estampe el 1 a 1.

En el momento de los penales, el arquero Bono se lució tras contener el disparo de Meshari Al–Nemer para darle el título al Al Hilal, que logró el triplete de Arabia Saudita.

Cristiano Ronaldo, quien se quedó con el récord de máximo goleador en una temporada de la Saudi Pro League con 35 goles, entró en un desconsolante llanto al perder la final y se marchó con mucha bronca del estadio King Abdullah Sports City de Jeddah. Mientras que Neymar, quien vio el partido junto a los suplentes, se sumó a los festejos con sus compañeros.