A la pena de ocho años de prisión fue condenado este lunes Facundo Nahuel Allende, por el crimen de Martín Lacassagne, hecho que ocurrió el 26 de septiembre de 2020 en una vivienda ubicada en calle 104 entre 65 y 67, del Barrio Fonavi.
La condena dictada por la jueza Luciana Irigoyen Testa marcó el desenlace de un proceso judicial, en cuyo último tramo un jurado popular integrado por doce ciudadanos, declaró culpable al acusado del delito de homicidio simple.
En aquella jornada la víctima recibió una puñalada por parte de Allende con un cuchillo, previamente ambos hombres habían mantenido una acalorada discusión que derivó en una pelea. Lacassagne, que esa noche festejaba su cumpleaños, fue trasladado al Hospital Municipal y murió a los pocos minutos, cuando era asistido en la guardia médica.
El fallo dado a conocer esta mañana por la mencionada magistrada en una audiencia de manera virtual contó con la participación de todas las partes, no obstante en la sala del Juzgado Correccional se hallaban los padres de la víctima, Ricardo Lacassagne y Luisa Benítez.
Estos últimos rechazaron, con marcado malestar, el monto de pena impuesto al autor del crimen de su hijo.
La jueza Irigoyen Testa decidió aplicar el mínimo de la escala penal en este tipo de delitos que prevé un máximo de 25 años de prisión.
Días pasados el fiscal Guillermo Sabatini había solicitado un pena de 12 años de prisión. En sus fundamentos tuvo en cuenta como agravante lo que consideró “un desprecio por la vida humana”, por parte de Allende que se retiró del lugar luego del hecho, sin haber brindado asistencia a la víctima.
La postura del representante del ministerio público contó con la adhesión del abogado Juan Pablo Roselló, que representó a la familia de la víctima, como particular damnificado.
En tanto, Daniela Cangiano, defensora del imputado, había requerido que al momento de ser condenado se aplicara el mínimo de la pena, tal como finalmente sucedió. La abogada había expresado que Allende no es un alcohólico, aunque en la jornada en que se cometió el trágico hecho tenía “un grado etílico bastante importante”. Y entendió que el episodio que terminó con la vida del hombre de 38 años fue un “hecho aislado, fortuito y sin intención”.
Durante el debate, Allende manifestó que actuó para defenderse de una agresión de Lacassagne y días después reiteró que se halla “muy arrepentido” de lo que hizo.
El recluso de 32 años está alojado en el Pabellón 14 de Batán, donde participa de proyectos de índole laboral con fines solidarios.