La posibilidad que el Tigre Diente de Sable tenga indicios de haber estado vinculado  con seres humanos transformaría este hallazgo en uno de importancia mundial.

Esto se debe a la disposición de algunos de los huesos encontrados, específicamente la patas, las cuales no están articulada y están dispuestas en una forma particular. No hay indicios tampoco que el animal fue arrastrado por el agua u otros animales.

Por lo cual se va a investigar, trabajar y excavar con cuidado. Dado que en ciencia más allá de lo que parece todo hay que confirmarlo.

En caso de concretarse sería un hallazgo sorprendente, dado que no hay muchos casos de una vinculación tan clara, a pesar que se sabe que convivieron en una misma época.

El felino – cubierto por yeso- ya fue retirado con una retroexcavadora y se encuentra en manos de profesionales para ser acondicionado y colocado en el Museo Histórico Regional del Parque Miguel Lillo, en la parte de Ciencias Naturales.

Ahora, ni bien estén dadas las condiciones se comenzará a trabajar en este bloque de yeso, limpiar y conservar cada uno de los huesos. 

Por eso se va a tener que abrir primero ese ‘bochón’ de yeso donde aparentemente está el esqueleto completo para ir lentamente extrayendo los huesos, uno por uno, de este esqueleto del Tigre Diente de Sable desenterrado.

Con respectos a por qué estaba tan cerca de la superficie, esto sería  porque quizá habitó en esta tierra más cerca en el tiempo que en otros lugares del mundo, por eso caminó sobre esa tosca, que es la misa que caminaban los primeros habitantes de esta zona.