Desde el Ministerio Público se recurrió una resolución de primera instancia que había rechazado una medida cautelar presentada por organizaciones ambientalistas. El proyecto sigue su curso, ya con acciones en la escena de operaciones.

La Cámara Federal de Mar del Plata rechazó un recurso de apelación presentado por el Ministerio Público Fiscal al fallo de primera instancia que rechazó la medida cautelar solicitada por organizaciones ambientalistas para detener el desarrollo del plan de exploración y explotación petrolera frente a las costas bonaerenses.

Los jueces Alejandro Tazza y el juez federal de nuestra ciudad Bernardo Bibbel, en condición de subrogante ya que su colega Eduardo Jiménez se encuentra de licencia y está vacante el cargo de tercer miembro del tribunal, consideraron que “debe rechazarse el recurso analizado, en su totalidad” incluso fija costas del proceso “en el orden causado”.

La presentación la había hecho a fines del año pasado el fiscal federal Santiago Eyherabide y responde al rechazo que en primera instancia había obtenido el pedido de amparo ambiental que inició Greenpeace Argentina y otras ONG´s ambientalistas contra el Estado nacional y otros.

Atacaba en ese origen al plan que está en ejecución ya con trabajos de exploración petrolera sobre las que, advertía la denunciante, anticipaban riesgos irreparables sobre el medio ambiente, por lo que exigían a la justicia que ordene detener toda actividad en ese sentido.

El Juzgado Federal N°2, a cargo de Santiago Martín, rechazaba el pedido de cautelar en cuanto a suspensión de actividades autorizadas por resolución de gobierno que implicaban el proyecto Perforación de pozo exploratorio Argerich 1 en Cuenca Argentina Norte (CAN 100), y también el pedido formulado por el Ministerio Público Fiscal para suspender el decreto en relación a adjudicaciones. Y ordenaba, en esa misma resolución, una serie de informes vinculados a la cuestión ambiental.

La fiscalía apuntaba a tres cuestiones fundamentales en esta apelación que no prosperó. Por un lado, su rol “esencial para salvaguardar los intereses ambientales y económicos en juego, dado los posibles impactos acumulativos de los proyectos de exploración y explotación petrolera”.

El segundo aspecto se relaciona con la desestimación de la obligación internacional de informar a Uruguay y a la posibilidad de daño transfronterizo. Y por último a la desestimación de un planteo referido al canon de explotación.

En ese conjunto también reclamaba detener otros proyectos y concesiones que con similares objetivos se estaban dando en otros puntos del Mar Argentino, con cierta cercanía unos de otros y con riesgo de impacto acumulativo. Tampoco prosperó ese reclamo.

Los camaristas revisan lo planteado por el fiscal y concluyen que, en particular sobre la primera de las tres cuestiones, considerada la más relevante ya que apunta al impacto ambiental, deja claro que lo resuelto por el juez federal de primera instancia considera que las presentaciones y fundamentos tanto del Estado nacional como empresas comprometidas en este proyecto petrolero “teniendo como horizonte una futura e hipotética etapa de explotación, sin necesidad de suspender la exploración en curso”.

“Estimamos correcta tal decisión del sentenciante, teniéndose en cuenta la etapa cautelar en la que nos encontramos y la falta de contundencia científica que pruebe el incumplimiento de los deberes del Estado Nacional vinculados a la emisión de GEI y a los compromisos asumidos en el marco del Acuerdo de París”.

Tazza y Bibel, que es juez federal en Necochea y fue convocado para convocar este tribunal, manifiestan que varios de los temas incorporados en los agravios analizados a partir de la presentación del fiscal “exceden el acotado marco procesal del amparo”.

Con esta resolución de alzada sigue sin interferencias el proyecto de exploración petrolera que está en pleno desarrollo, según se ha advertido con la presencia cada vez más seguida en Mar del Plata de buques que participan de las tareas preliminares.

Varias embarcaciones de apoyo ya han recalado en Mar del Plata, que es la base logística para aprovisionamiento de insumos, e incluso fondeó en cercanías un buque que se encargará de las perforaciones.

Las resoluciones judiciales frente a los distintos planteos que se han hecho, siempre con la intención de frenar estas tareas de exploración y explotación y siempre también con el objetivo de preservar condiciones ambientales y en particular la fauna marina, no han frenado pero sí han impuesto algunas condiciones a los operadores de este ambicioso plan en aguas cercanas.

Con información de Ahora Mar del Plata