En los últimos días de 2023, cientos de vecinos de la zona Oeste hicieron horas de fila bajo el sol en la puerta del boliche de Villa Sarmiento, Pinar de Rocha -entre otros lugares-, por un motivo muy particular: a cambio de permitir el escaneo del iris de los ojos, recibían una remuneración en criptomonedas que se podían canjear por pesos en efectivo.

Al parecer este fenómeno está llegando a nuestra ciudad y en los últimos días es común ver en las redes sociales gente preguntando por los lugares dónde se hace el escaneo para poder obtener dinero a cambio.

Si bien puede sonar algo distópico, se trata de un proyecto impulsado por Worldcoin, empresa a cargo de Sam Altman -el creador de la inteligencia artificial ChatGPT- para “garantizar la seguridad de quienes invierten, compran o venden” en el mercado de las criptomonedas.

Aunque no está del todo claro que hay por detrás de este “negocio de la identidad”, la prueba es bastante fácil: hay que bajarse la aplicación de la empresa y luego por medio de un artefacto denominado “orbs” -una esfera plateada digna de Star Wars-, se toma la imagen del iris de cada participante. Todo esto a cambio de una suma de diez monedas de bitcoin, moneda cuyo valor oscila de acuerdo a las oscilaciones del mercado.

Pero no conviene tomarse a la ligera esta situación: cada iris posee 256 puntos característicos que nos convierten en individuos irrepetibles. Garantizan la identidad aún más que las huellas digitales, que cuentan con 40 patrones personales.

¿Entonces, cuál es la justificación de esta prueba? Según la empresa, Worldcoin necesita garantizar que del otro lado hay un humano y no un robot en las transacciones económicas. Si bien aseguran que no retienen datos personales ni copias del iris, no logran explicar cómo impedirían, por ejemplo, que alguien pudiera repetir el proceso sin tener esa información específica.

La información biométrica obtenida es inalterable, lo que significa que cederla a una empresa privada expone a los participantes a una extrema vulnerabilidad en términos de privacidad e identidad.

Se calcula que en Argentina más de 360.000 personas ya llevaron a cabo este proceso que generó concentraciones y extensas colas en centros comerciales, plazas, boliches y grandes centros, principalmente en el conurbano.

Mientras tanto, la Agencia de Acceso a la Información Pública (AAIP), autoridad de Aplicación de la Ley 25.326 de Protección de Datos Personales, informó que está llevando adelante una investigación sobre el tratamiento de datos personales que realiza la Fundación Worldcoin en Argentina, con el objetivo de verificar las medidas de seguridad adoptadas en el marco de la protección de la privacidad de las y los usuarios de la aplicación digital.

Luego de tomar la información de los voluntarios, la empresa les ofrece un bono que luego pueden canjear. Justamente, en los últimos días se pudo observar en las inmediaciones de la plaza Sarmiento de Ramos Mejía carteles en los que compradores desconocidos publicaban un número de celular y ofrecían: “Compro Worldcoin. Estamos cerca. Pago más”.

Aún más, en Facebook ya se están creando decenas de grupos de compra y venta de WorldCoin.

Con información de Clarín