En medio de un operativo y rastrillajes por tierra y aire, pescadores reportaron anoche el hallazgo de restos humanos adentro de un tiburón capturado en la zona donde se buscaba desde hace 8 días a Diego Barría, un joven de 32 años que había sido reportado como desaparecido. Familiares de Barría reconocieron un tatuaje de color en el hallazgo, que ahora es investigado por peritos forenses.
Barría había desaparecido el sábado pasado por la noche. Salió el 18 de febrero en su cuatriciclo a pasear por la zona de Rocas Coloradas, un sitio habitual de pescadores en el norte de Comodoro Rivadavia, y no volvió. Pocos días después y en un operativo de búsqueda, su vehículo fue hallado con graves daños en su carrocería.
Este lunes pasado se encontró el cuatriciclo Yamaha Raptor en el que el hombre se movilizaba y su casco, por lo que se presumió que podría haber protagonizado un accidente. Barria medía 1,85, tenía una contextura robusta, pelo castaño tipo lacio corto y ojos color café. En el momento de su desaparición vestía botas naranjas, jogging negro, remera blanca y una campera blanca con la identificación del trabajo “Vientos del Sur”. Llevaba también una mochila con elementos de campo.
“Solo una señal para poder encontrarte, por favor. Dale mi loco, no me dejes, ruego a Dios que aparezcas pronto. Acá estoy esperándote. No me asustes así”, escribió en Facebook Virginia, la esposa del desaparecido. Pocas horas más tarde, realizó otro conmovedor posteo. “Te escuché acelerar toda la noche con la ilusión de que volvías a casa. ¿A dónde estás, mi mañoso?”, posteó junto a una imagen de Diego arriba de una camioneta.
Luego agradeció a quienes estaban ayudando en la búsqueda de Diego y rezando por él. Todos estamos rogando para que aparezca pronto, no dejen de pedir por él, no perdamos la fe. No lo dejen solo, tráiganme a Diego”.
El joven había salido de su casa 18 de febrero, cerca de las 21 horas. El miércoles pasado, en una conferencia de prensa, la comisaria Daniela Millatruz aseguró que en los primeros rastrillajes “solo fue hallado el cuatriciclo y el casco, y de él no ha habido novedades”.
Los rastrillajes se realizaron con canes a pie con colaboración de Prefectura Naval , familiares y amigos de Diego Barria. Y además se están realizando rastrillajes aéreos y en el mar. “Sin duda hubo un accidente y se están realizando las pericias correspondientes para saber si hubo otro vehículo involucrado”, agregó.
La jefa policial indicó que las hipótesis que se manejan es que después del accidente “puede haber salido caminando o que lo haya agarrado la marea”, teniendo en cuenta que el “el mar arrastró el asiento y lo dejó en la costa”.
Sostuvo que “se hicieron rastrillajes de noche pero se complica porque es todo a campo abierto, así que se comienza a la hora de la mañana y se termina cuando baja el sol”. Por su parte, el jefe de Operaciones de la Unidad Regional, Omar Delgado, señaló que está trabajando la División de canes, motos, bomberos voluntarios, entre otras fuerzas y se estará pidiendo la colaboración de la Policía de Camarones eventualmente.
Sin embargo, este domingo por la madrugada la investigación dio otro giro. Sobre la 1.20, personal de Prefectura Naval respondió al llamado de dos pescadores de Caleta Córdova que reportaron haber encontrado restos humanos en un cazón de 1,50 metros.
La policía informó que el hallazgo se produjo “al retirar las víseras” del animal, en donde se encontró “dermis, grasa y carne humana”. También se divisó “un tatuaje color rosa, verde y rojo con una inscripción ilegible. Los familiares reconocieron el tatuaje como el del ciudadanos desaparecido, Diego Barría”.
Horas antes se habían encontrado en la zona los lentes dentro de un estuche del hombre desaparecido. Fuentes de la fiscalía aseguraron que por el momento se manejan diferentes hipótesis. Tampoco se descarta un accidente o posible homicidio.
La Nación