Se trata de semillas de estación en el marco del programa nacional Pro Huerta.

Las huertas familiares mejoran la capacidad de los pequeños agricultores y de las comunidades a enfrentar los problemas interrelacionados de seguridad alimentaria, nutrición, salud y seguridad económica. Sus efectos positivos, así como sus beneficiarios, entre otros, son los siguientes:

-La generación de ingresos económicos quienes se incorporen en la etapa de comercialización y de trabajo,

-El mejoramiento de la seguridad alimentaria

-El aumento de la calidad alimentaria gracias a la ingesta de verduras y hortalizas agroecológicas

-Diversidad productiva

-El mejoramiento del medio ambiente como consecuencia del reciclado de los desechos, la protección del suelo contra la erosión y la protección de la biodiversidad local.

-La confianza para trabajar mancomunadamente sobre las prácticas agrícolas sustentables y de bajo costo.

Las semillas son un recurso estratégico de las acciones que lleva adelante el programa junto con instituciones, organizaciones y familias en situación de vulnerabilidad social, principales destinarias de este programa.

Se entregan en: