Por Alejandro Sánchez
Necochea está linda y cuidada.
Los espacios públicos son el lugar donde turistas y residentes locales disfrutan.
El tiempo acompaña como nunca. Estamos viviendo una intensa ola de calor que hace que las playas de Necochea y Quequén estén llenas y sean convocantes.
Hoteleros y quienes alquilan están de parabienes, con capacidad colmada y reservas para lo que viene.
La gastronomía no se queda atrás con salones completos y los negocios con mucha demanda.
De esta forma el verano se suma con fuerza a la rueda económica y laboral de Necochea y el éxito puede trascender la estación y sus resultados verse reflejados durante todo el año.
Como pasaba antes y como queremos que vuelva a pasar y se mantenga en el futuro.
Es por eso que es necesario que el árbol no tape el bosque, por eso a este presente ansiado, hay que ayudarlo a que se mantenga.
Por eso la conjunción entre lo público y lo privado es clave.
Brindar servicios, dirigir la política turística, promocionar la ciudad y facilitarles diferentes cuestiones a los privados son necesarias para el estado municipal.
Mientras que el privado debe ofrecer servicios de calidad, sumar ideas, acompañar al estado, no tratar de esquilmarlo y tener en claro que el turista es el que hace posible que la rueda continúe. Un turista contento es la mejor publicidad y es impagable.
Cuidarlo y no aprovecharse es clave.
La mayoría lo entiende, hay algunos que no. Ya no se puede alquilar departamentos como si estuviéramos en la década del 80 o sólo para salvarnos. Una ubicación estratégica debe ser acompañada de un espacio acorde y cómodo.
El turista viene a pasar sus vacaciones, no a hacerse problemas.
Esta es una empresa donde todos estamos. Es una cadena, juntos podemos volver a ser, pero divididos somos tan débiles como el más frágil de los eslabones.
Vivamos el verano, disfrutemos y ayudemosnos.