Durante una audiencia ante el Tribunal de Casación Penal de La Plata para apelar las condenas, los acusados y los papás del joven asesinado volvieron a verse las caras.

La audiencia que se llevó a cabo este martes en el Tribunal de Casación Penal de La Plata fue extensa y a la misma vez dolorosa para Graciela Sosa y Silvino Báez. Los papás de Fernando Báez Sosa se presentaron en compañía de sus abogados y, nuevamente, volvieron a ver cara a cara a los ocho rugbiers condenados por el crimen. Esta fue la primera vez que los imputados dejaron la alcaldía de Melchor Romero tras la condena.

Angustiada, en un momento de la audiencia la propia Graciela le hizo una cruda pregunta a los imputados. “¿Por qué lo hicieron?, ¿por qué mataron a Fernando?”, les dijo sin miedo. Esa duda le da vueltas en la cabeza de forma constante.

Durante los últimos días, la mamá de Fernando Báez Sosa no la estuvo pasando nada bien. Contó que esperaba este día con mucha ansiedad y con toda la esperanza de que el Tribunal de Casación Penal bonaerense hiciera “justicia”.

Además, sobre los condenados, aseguró que “los ocho participaron” y que por eso mismo, “los ocho deben recibir perpetua”. Dolorida con su presente y extrañando mucho a su hijo, se sinceró: “Se sobrevive como se puede. Es dicíficil. Estos días vengo con mucha angustia pensando en la decisión que tomará en el tribunal”.

En primer lugar expusieron durante media hora los fiscales Gustavo David García y Juan Manuel Dávila y el particular damnificado, con Fabián Améndola representando a los papás del joven de 18 años.

“La audiencia de hoy fue de mejoramiento de recurso de casación, en la cual el tribunal le dio una oportunidad a cada una de las partes para mejorar los recursos que se hicieron por escrito”, aclaró Fabián Améndola en comunicación con este portal.

Los jueces del Tribunal Oral en lo Criminal N°1 de Dolores, María Claudia Castro, Emiliano Lázzari y Christian Rabaia, condenaron el 6 de febrero por el delito de “homicidio doblemente agravado, por el concurso premeditado de dos o más personas y por alevosía en concurso real con ideal con lesiones leves” a Máximo Thomsen, Ciro Pertossi, Enzo Comelli, Matías Benicelli y Luciano Pertossi. Todos recibieron perpetua.

Por su parte, Ayrton Viollaz, Blas Cinalli y Lucas Pertossi recibieron una pena de 15 años de cárcel por ser partícipes secundarios del mismo hecho.

En este sentido, la fiscalía y el particular daminficado consideran, según el letrado, que todos los rugbiers deberían recibir una pena de perpetua, ya que entienden que “los ocho son coparticipes y que a los ocho les corresponde la misma pena, porque el dolo homicida no comienza en el momento que dice el tribunal, sino mucha antes, dentro del boliche Lebrique”.

“Además, alegamos que, en todo caso, el aporte que hicieron los tres que recibieron 15 años, no puede ser de otra manera que considerado como un aporte esencial para la relización del hecho, lo cual significa que serían partcipes primarios y no secundarios y que les correspondería una condena a perpetua”, sumó Améndola.

Tras la exposición de ambas partes, el tribunal le dio la posibilidad de hablar a los padres de Fernando. En ese momento, Graciela Sosa contó detalles de cómo es su vida ahora, y muy conmovida dijo que tanto ella como su esposo se sienten “muertos en vida”.

Dolorida, le hizo a los rugbiers una pregunta que no deja de aparecer en su cabeza. “¿Por qué hicieron eso?, ¿por qué mataron a Fernando?”, les dijo. Ninguno respondió. A su turno, cuando el tribunal les permitió hablar, Máximo Thomsen hizo uso de su palabra.

“Yo no quise matar a nadie”, sostuvo, y luego denunció que el día en que la policía los fue a detener en la casa que alquilaban en Villa Gesell, en realidad nunca les explicaron bien los motivos por los cuales estaban siendo aprehendidos y por el cual después prestaron declaración.

La defensa, de la mano de Hugo Tomei, por su parte, planteó varias nulidades, algunas de las cuales ya fueron rechazadas en oportunidades anteriores. Una de ellas tiene que ver con anular el juicio y hacer un nuevo proceso.

Del mismo modo, el abogado considera que las condenas para sus defendidos deberían ser por “homicidio en riña” en el caso de los que ya tienen prisión perpetua y que los tres sentenciados como “partícipes secundarios” deberían ser absueltos.

TN