Entre los anuncios que ayer hizo el intendente Arturo Rojas, en el inicio del periodo de sesiones ordinarias del Concejo, estuvo lo referido a la construcción de la tan ansiada planta de efluentes en punta Carballido.
En el detalle de informe de gestión 2023 se detalla la situación actual de esta obra, cuyos terrenos ya habían sido adquiridos durante la gestión de Daniel Molina:
“A la fecha, el proyecto se encuentra aprobado en ENOHSA, y ha sido presentado para la financiación del BID, con el objetivo de la construcción del Sistema Cloacal Completo (compuesto de colector cloacal, cañería de cruce del Río, estación de bombeo y planta de tratamientos de efluentes cloacales).
El proyecto se llevará a cabo en el Partido de Necochea, al Este del núcleo Necochea-Quequén, en un predio de aproximadamente 14 hectáreas adquirido por la Municipalidad para tal fin de ubicado entre las calles 567-571, Circunscripción XIV, parcela 701 ar, en las inmediaciones de Punta Carballido, en la localidad de Quequén.
La realización de una planta de tratamiento de los efluentes cloacales resulta un imperativo en el plan de infraestructuras de ciudades medias ya sea para mejorar su perfil sustentable y su nivel de saneamiento tendiente a ayudar a conformar una alta calidad de vida en la condición de ciudad saludable como para erradicar la contaminación diversa que provoca la ausencia de redes y de sitios receptivos de los efluentes que reduzcan al mínimo su impacto negativo. El complejo urbano Necochea-Quequén posee un estándar importante de redes cloacales con una cobertura cercana a la media nacional en Quequén y muy superior a ella en Necochea.
El completamiento de tal dotación exige un centro receptivo del vertido de dicha red que aplique el tratamiento de neutralización de efectos ambientales adversos al producto recolectado por el sistema cloacal, tratamiento requerido por los lineamientos internacionales en materia de salubridad urbana y a la vez mucho más significativo en áreas que como las de Necochea existe una importante utilización turística de su frente marino, que hoy recibe en vertidos libres, los residuos recolectados.
El proyecto corresponde a la construcción y operación de las primeras instalaciones de depuración del efluente cloacal del núcleo urbano de Necochea y Quequén.
Actualmente, dicho efluente es volcado al mar sin ningún tratamiento previo, en cercanías de la línea de costa, en el sector denominado Punta Carballido, ubicado al Este del centro de la ciudad, tal como lo muestra la figura Nª 1.
De acuerdo a muestreos realizados, los efluentes que son volcados en Punta Carballido muestran muy bajos valores de metales pesados, una caracterización físico química que podría ubicarse dentro de un efluente cloacal medio, pero con un muy alto contenido de sales, probablemente debido al contenido de sales aportada por el agua de abastecimiento (agua subterránea), y con la carga bacteriana alta, típica de un efluente cloacal no tratado.
La retención de sólidos, planteado como primera etapa del proyecto denominada “pre tratamiento del efluente”, conlleva una disminución de la carga orgánica del efluente, con lo cual, disminuirá la DBO (Demanda Biológica de Oxígeno) aportada al mar. De acuerdo a lo observado en otros pretratamientos similares, se estima que la reducción de carga orgánica será del orden del 10 %.
El pretratamiento propuesto no es la solución, pero es la antesala para la solución de este problema: el retiro de sólidos sedimentables y flotables es lo que permitirá acondicionar al líquido para que pueda ser transportado a través de un emisario, alejando del alcance de los bañistas a las bacterias patógenas provenientes del efluente. Sin un pretratamiento previo no se puede hacer un emisario.
No obstante, visto los resultados evaluados, se hace necesario reiterar, la necesidad de proseguir las acciones de saneamiento luego del pretratamiento, con la construcción de un emisario submarino, bien diseñado, con el largo y el desarrollo del sistema difusor adecuados, estimándose el mismo en 1.500 metros mar adentro”.