Simularon un secuestro para estafar a matrimonio en una fuerte suma de dinero nacional y extranjero.
Mediante una llamada telefónica extorsiva un matrimonio de jubilados resultó estafado en una fuerte suma de dinero en moneda nacional, dólares y euros; y hasta un costoso reloj importado. El nuevo hecho de esta modalidad delictiva en el que de manera constante resultan damnificados los adultos mayores se encuentra en plena etapa de investigación policial, no habiendo surgido hasta el momento ninguna novedad de interés que permita atrapar a los responsables.
El último miércoles, en horas del mediodía, una mujer de 73 años de edad recibió un llamado en el teléfono de línea fija en su domicilio ubicado en la calle 24. Ni bien atendió escuchó la voz de un hombre que simuló se su hijo, quien le expresó: “Mamá, me siguieron, me pegaron; dale todo, quieren cinco mil dólares”.
La comunicación continuó con un falso secuestrador que dio indicaciones de la manera en que debía dejar el dinero estadounidense, exigiendo también pesos en moneda nacional.
Aturdida, ante el convencimiento de que su hijo se hallaba secuestrado, la jubilada depositó en una bolsa la suma de 500 dólares y 70.000 pesos que dejó en un cantero frente a las puertas de la vivienda, que luego retiró un individuo.
Pero no todo terminó en esa acción. Hubo dos llamadas posteriores en la que el estafador demandaba más dinero y objetos de valor a cambio de preservar la vida de su hijo.
El matrimonio decidió hacer entrega de 300 dólares y con posterioridad dejó en el mismo lugar una tercera bolsa que contenía 5.000 euros y un reloj marca Rolex.
En la última comunicación el delincuente reiteró que cerraran las persianas de la casa, que no llamaran a nadie y que contaran hasta doscientos antes de salir a la vereda.
Transcurridos algunos minutos la mujer mantuvo una comunicación telefónica con su hijo, manifestándole este último que se encontraba en perfecto estado de salud y que en ningún momento había sido víctima de un secuestro.
El antiguo ardid funcionó y una vez más los malvivientes lograron salirse con la suya, causando una seria pérdida económica al matrimonio, además del mal momento que atravesaron.
Según se supo, el hijo de los damnificados es estudiante universitario con residencia en la ciudad de La Plata, y cuando ocurrió el hecho se encontraba en nuestra ciudad.
Por una cuestión de jurisdicción la estafa fue denunciada en la Comisaría Tercera, cuyo Gabinete Técnico Operativo inició una investigación a la que se sumaron oficiales de la DDI.
En las primeras diligencias se relevaron cámaras de seguridad públicas y privadas ubicadas en las inmediaciones.
Un vocero de la fiscalía interviniente señaló a TSN Noticias que el hijo del matrimonio aportó un registro fílmico en el que se observa el momento en que un sujeto retira una de las bolsas. Esa imagen está siendo analizada por los investigadores con el fin de poder identificar a la persona, señaló la misma fuente.
Asimismo, está previsto contar con el registro de llamadas que recibió la línea de telefonía fija en una determinada franja horaria de ese mismo día.
“Son hechos que no se pueden prevenir y causan un daño terrible”, resaltó un experimentado policía que forma parte de la pesquisa, y confió que con los elementos que puedan reunirse se llegue a los autores del ilícito.
Tomó intervención la fiscal Verónica Posse que dispuso el inicio de una causa penal caratulada como “estafa”.