La Fiscalía local ha puesto la lupa sobre dos individuos que cumplen condena en la Unidad Penitenciaria de Batán por robos cometidos en Necochea y Quequén. Sospechan que estos reclusos no solo continúan delinquiendo desde prisión, sino que también liderarían una banda dedicada a la realización de estafas económicas bajo la modalidad de fraude informático.

La investigación, encabezada por el fiscal Carlos Larrarte, se encuentra en una etapa crucial, con los investigadores especializados en delitos informáticos trabajando arduamente en el análisis de diversas diligencias. Se espera que en los próximos días surjan nuevos resultados que permitan esclarecer el modus operandi de esta presunta organización criminal.

La causa judicial se centra en los delitos de “estafa y defraudación informática”, contando con la colaboración del gabinete de investigación digital de la Fiscalía General, quienes aportan su expertise en el rastreo de actividades ilícitas en el ciberespacio.

Los dos reclusos bajo la mira de la justicia fueron identificados, uno de Necochea y otro de Quequén. Ambos ya habían sido condenados previamente por la Justicia local por delitos de robo, y ahora se sospecha que desde sus celdas en Batán han extendido su accionar delictivo hacia el ámbito de las estafas virtuales.

En un operativo coordinado días atrás, se llevaron a cabo cuatro allanamientos simultáneos en el marco de esta investigación. Dos de ellos se realizaron en domicilios de Necochea y Quequén, buscando posibles cómplices o rastros de la actividad ilícita fuera de la cárcel. Los otros dos allanamientos tuvieron como objetivo las celdas de Vivas y Pueblas en la Unidad Penitenciaria de Batán, donde se intentó secuestrar dispositivos electrónicos y otra evidencia que pudiera confirmar su participación en las estafas.

La Fiscalía se muestra decidida a desarticular por completo esta banda que operaría desde el interior del sistema penitenciario, generando perjuicios económicos a ciudadanos de Necochea y Quequén. Se espera que el avance de la investigación y los resultados de las pericias informáticas permitan establecer el alcance de las estafas y la identidad de otros posibles integrantes de esta organización criminal.