Si bien solo faltan cerrar oficialmente seis estados y Biden tiene 238 electores y Trump 213, extrañamente el conteo de votos se detuvo donde el republicano tiene ventaja. Se podrá demorar, pero Trump ya ganó.
*Por Horacio Minotti. Director Ejecutivo de Trust Consultora. Póngase el lector en el lugar de Donald Trump. Imagine que está en una competencia reñida, y que al final del día, todos los estados donde su rival ganó están contaditos hasta el final, allí el voto por correo no impidió nada; pero en los que usted va ganando, el conteo se detuvo en torno al 90% de los votos, y lo quieren hacer esperar unos días. Perdón el lenguaje, pero seguramente si le pasase, usted creerá que lo están cagand…
Así están las cosas ahora: Trump ganó donde tenía que ganar. En Florida, donde todo indicaba una pelea voto a voto y un recuento demorado por días. Nada de eso ocurrió, el acual presidente se impuso por 3 puntos y tema liquidado. En Ohio (dicen en EEUU que quien gana Ohio es presidente) se impuso con comodidad, y en Texas, donde los demócratas dijeron que iban a dar la gran sorpresa, no hubo nada de eso, y quedó en manos del republicano.
Ahora bien, con el conteo terminado en todos los Estados menos en 6 de ellos, Joe Biden tiene un su haber 238 votos electorales y Trump 213.
Pero decidieron no dar por terminado el recuento en Georgia, donde están escrutados el 94% de los votos y Trump se impone con el 50,5% contra el 48,3%. Algo así como que todos los que faltan contar deberían ser para Biden para que de vuelta el resultado. Georgia tiene 16 votos electorales, que serán de Trump, mas temprano que tarde.
Decidieron no dar por terminado el recuento en Georgia, donde están escrutados el 94% de los votos y Trump se impone con el 50,5% contra el 48,3%.
Algo muy similar ocurre en Carolina del Norte, también con el 94% escrutado y dos puntos de ventaja para Trump, tiene 15 votos electorales que serán para el actual presidente.
En Pensilvania decidieron parar la cosa antes. Es el Estado con menor cantidad de votos escrutados extrañamente, solo el 67%, pero Trump lleva 12,5 puntos de distancia a su rival, es inalcanzable y se llevará los 20 electores de ese estado.
En Michigan por su lado, dejaron el conteo en el 87%, allí la diferencia es mas rala, Trump supera a su rival por 1,5% y la cosa si podría darse vuelta aunque no es probable. Michigan tiene 16 votos electorales.
Por fin, quedan Wisconsin y Nevada. En el primero el conteo se paró en el 95% y allí sí, Biden estaría cerca de dar una sorpresa: se está imponiendo por 0,3% y el estado cuenta con 10 votos electorales. Por su parte en Nevada el recuento se paró en el 67% con Biden arriba por 0,6%.
Hagamos cuentas: a los 213 votos electorales que se dignaron a adjudicarle a Trump hasta ahora, hay que sumarle 16 de Georgia, 15 de Carolina del Norte y 20 de Pensilvania, es decir, Trump tiene a estas horas 264 votos electorales y está solo a 6 de los 270 que necesita para ser presidente.
Biden debería ganar todos los otros estados con conteo incompleto para hacer el milagro. Tiene que ganar Michigan (donde va pardiendo por 1,5%), Wisconsin (donde hay un empate) y Nevada (donde gana por 0,6%).
Biden debería ganar todos los otros estados con conteo incompleto para hacer el milagro. Tiene que ganar Michigan (donde va pardiendo por 1,5%), Wisconsin (donde hay un empate) y Nevada (donde gana por 0,6%).
Eso sin considerar que sería muy extraño que Michigan y Wisconsin, votasen tan distinto a Pensilvania, tres estados que conforman el llamado “cinturón de óxido”, que tienen una identidad en cuanto a composición social e intereses económicos, y que juntos le dieron la victoria a Trump en 2016.
No hacen más que prolongar la agonía demócrata. Trump ya ganó.