Por Alejandro Sánchez

Comicios

Siempre para momentos similares en otros años electorales sucede que existe una diferencia de momentos entre los ciudadanos y los políticos.

Hoy vemos en nuestra ciudad que hay un ímpetu de precandidatos por las calles dando a conocer y difundiendo sus ideas – en este caso no todos- y tratando de dialogar con vecinos.

Mientras que por el otro lado, para los vecinos es un momento más del año, donde las prioridades son las comunes, muy distantes a las políticas, es más es nulo el interés en el inicio de agosto por las PASO o lo que pueda llegar a pasar en ellas.

Recién se estima en los últimos diez días como que se inicia una fiebre por parte de los vecinos para informarse y definir el voto.

Está claro que hubo apuro en diferentes sectores políticos de ya estar en la calle.

Más allá que es bueno y loable que dialogan con vecinos y les informen sus propuestas todavía falta más de un mes para las primarias (serán el 12 de septiembre ).

Además hay otra cuestión, todavía ni siquiera se sabe cómo se desarrollarán los comicios durante ese día.

Por ejemplo se habilitarán las mismas cantidad de escuelas. Habrá un número determinado de mesas por establecimiento para que no se reúna mucha gente, ni haya grandes filas para emitir su voto. ¿Cuántos fiscales habrá en cada mesa?, es conveniente que las mismas personas estén durante doce horas compartiendo el mismo lugar.

Todas preguntas claves, que son necesarias para dar seguridad al electorado, de manera que se pueda acercar a votar.

De esto todavía no hay respuestas.

Pero más allá de eso se insiste con la parafernalia proselitista.

La campaña oficialmente comienza hoy, algunos se apresuraron, dado que el vecino está en otra cosa, en la diaria, en su trabajo, en la familia, sobrellevando la pandemia. Cómo que no es el momento para, encima de todo lo que ha sucedido, estar al tanto de la difusión de propuestas.

Por eso creemos que en las PASO lo que esperan los vecinos de la política es una sola cosa: Empatía.
Quieren que quienes busquen acceder al Concejo Deliberante se pongan en la piel del ciudadano común, que sepa de las necesidades de la ciudad y el distrito y así busque herramientas para mejorar la calidad de vida de todos.