Pablo Juliano, legislador nacional de la UCR, impulsó un proyecto de ley para que el Banco Nación no sea privatizado.
El Banco de la Nación Argentina conforma la extensa lista de las 41 empresas públicas que están “sujetas a privatización” dentro de la Ley Ómnibus que presentó el ejecutivo al Congreso Nacional.
El diputado nacional de la UCR, oriundo de nuestra ciudad, se distanció de esta medida afirmando que “la entidad bancaria que está al servicio del progreso del país debe seguir en manos del estado”.
El legislador radical pone énfasis en la influencia del Banco Nación en los 2311 gobiernos locales y sobre todo, las localidades menos pobladas, en las cuales habitan el 54 por ciento de la población.
En este sentido, Juliano explica que “el 74 por ciento de las localidades de Argentina tienen menos de 10 mil habitantes, mientras que el 46 por ciento de la población reside en el 2,4 de los municipios argentinos”. “El Banco Nación es indispensable para el interior productivo del país no solo por sus líneas de créditos históricas para la producción y el empleo, también por las sedes en todo el país de manera federal, aportando producción, trabajo y riqueza en el sector privado y es la banca pública que ha sostenido siempre un fuerte vínculo en favor del progreso”.
En la misma línea el representante del congreso nacional dijo “el Banco Nación debe retomar como línea principal de sus funciones los créditos al sector productivo, a las Pymes, emprendedores, economías regionales, productores rurales funciones que son irremplazables e insustituibles”.
Con miras al futuro, Juliano argumentó sobre su proyecto que “cuando la economía se estabilice, será clave su rol en el otorgamiento de créditos hipotecarios, un tema sensible en un país con alto déficit habitacional”.