En los últimos días, un hallazgo macabro generó conmoción en la ciudad de Mar del Plata: una mujer encontró al menos media docena de caballos descuartizados en un descampado. De acuerdo con la información publicada en medios locales, la damnificada y su familia sospechan que los faenaron para vender la carne de los animales.

El descubrimiento se dio tras la denuncia de una familia de campo que vive en el barrio Malvinas Argentinas. Según una reconstrucción del medio 0223, una mujer reportó el robo de uno de sus animales el viernes por la noche. “El sábado a la noche recibimos un mensaje”, indicó Andrea, la damnificada.

Luego de esa alerta, se dirigió con su marido a un descampado en la zona norte de la ciudad balnearia. “Nos encontramos con cinco caballos y la petisa descuartizados. A los pocos metros había otro potrillito muerto”, dijo Andrea.

Los caballos estaban muertos, con signos de haber sido descuartizados y esparcidos por el descampado; incluso sus cabezas aparecieron distribuidas en distintos puntos del lugar. “Totalmente desgarrador. No logro entender hasta dónde llega el ser humano”, lamentó.

En diálogo con el portal marplatense, la mujer explicó que no pudo precisar la ubicación exacta del descampado, ya que su teléfono no logró geolocalizar el lugar. Indicó, sin embargo, que habían recorrido un tramo por la Ruta Nacional 2 y luego pasaron por el Aeropuerto Internacional de Mar del Plata. En ese contexto, aseguró que los restos podrían estar entre los barrios Parque El Casal y Estación Camet.

“No había nadie”, agregó Andrea, al mencionar que no pudo dar con vecinos que le brindaran información sobre la aparición de los animales.

Por otro lado, aseguró que el robo de caballos “es moneda corriente” en Mar del Plata. “Aparentemente los descuartizan para vender la carne. O sea que hay una carnicería que compra la carne”, sostuvo.

Un caso similar se registró en abril de este año, cuando aparecieron caballos muertos en la Ruta 88 y la calle 515. En esa oportunidad, una familia denunció el robo de al menos 140 animales, aunque no se pudo identificar a los responsables.

El robo de ganado (abigeato) –que incluye vacas y caballos– está penado por el Código Penal argentino, con sanciones que pueden llegar hasta cinco años de prisión. Se agrava, además, cuando implica la matanza de los animales.