Le pidió que levante la caca de su perro y fue atacado a correazos en Boedo. La víctima es un hombre de 73 años, con discapacidad en una de sus piernas, que recibió una brutal agresión por la que le tuvieron que dar ocho puntos de sutura en la cabeza.
La golpiza feroz ocurrió sobre la calle Virrey Liniers al 1700, barrio porteño de Boedo, cuando el hombre se bajó de su auto y observó que el perro de una vecina había hecho sus necesidades en la vía pública y ella no lo había levantado.
Ante eso, se acercó de buena manera a exigirle que levante la caca de su animal, pero en vez de recibir una respuesta positiva, quedó envuelto en un ataque.
Es que la mujer, sin mediar mayores palabras, comenzó a atacarlo con la parte metálica de la correa de su perro.
El momento quedó registrado por las cámaras de seguridad de una casa y en ella se permite ver cuando la victima intenta escapar de la agresión, pero por su discapacidad se cae al piso y nuevamente es atacado, esta vez con un palo.
Asimismo, la mujer descargó su furia contra el auto del jubilado en el que le dejó varias abolladuras en la puerta del acompañante y el techo.
Luego del ataque, la vecina se dio a la fuga, mientras que el hombre debió ser trasladado de urgencia al hospital donde le dieron ocho puntos de sutura en la cabeza: “Está mejor, pero sigue dolorido”, indicó Sebastián, su hijo.
“Por lo que me contó mi papá, él le pidió que levante el excremento del perro. Ella no le dio bola, él le reiteró el pedido y ella le dijo `yo no levanto la caca del perro’ y luego pasó lo que se ve en el video”, explicó.
El joven contó que la mujer ya había tenido inconvenientes con otros vecinos: “Mi papá sigue con dolor de clavícula, de costilla, la rodilla inflamada y los brazos golpeados”.
Ahora, tras la viralización del caso, la agresora fue identificada y quedó imputada por lesiones. NA